El Centro de Predicción del Clima Espacial (Swpc) de Estados Unidos ha alertado de la llegada de tormentas solares geomagnéticas hasta la Tierra. Una de ellas, que impactará este lunes por la noche, ha sido catalogada como “grave” por los expertos, ya que podría dar lugar a alteraciones.
Una gran tormenta geomagnética impactará contra la Tierra este lunes por la noche. Pese a que inicialmente el Centro de Predicción del Clima Espacial adelantaba que la fuerza de las tormentas podrían alcanzar fuerzas de G2 “moderada” y G3 “fuerte”, este domingo advertía que este lunes se podría llegar a condiciones G4 “graves”.
Este tipo de fenómenos, también conocidos como eyección de masa coronal o CME, consisten en una explosión de plasma y material magnético del Sol, que llega hasta nuestro planeta. De esta manera, pueden dar lugar a corrientes en los campos magnéticos de la Tierra, causando entre otras cosas auroras boreales.
La escala utilizada para medir la fuerza de estas tormentas oscila entre G1 y G5, siendo la magnitud más baja G1 y la más alta G5. La presencia de auroras boreales es uno de los indicadores de la fuerza de las tormentas, siendo mayores cuanto más al sur aparezcan estos fenómenos. En el caso de G1 pueden ser visibles en Maine y la península superior de Michigan, mientras que en G5 podrían aparecer en Florida y el sur de Texas.
Respecto a los efectos de este tipo de fenómenos, pueden causar alteraciones en la navegación, las comunicaciones y las señales de radio. En el caso de las de menor intensidad, pueden generar impactos menores desde en la red eléctrica hasta las operaciones de los satélites, mientras que en G4 -como la que se espera este lunes- puede dar lugar a “una perturbación importante en el campo magnético de la Tierra”.
Pese a ello, desde el Swpc lanzan un mensaje de calma, recalcando que, “el público no debe anticipar impactos adversos y no es necesaria ninguna acción, pero debe mantenerse adecuadamente informado sobre la progresión de la tormenta visitando nuestra página web”, así como que la mayor parte de los problemas son “normalmente mitigables”.