Un ganadero de Menasalbas (Toledo) ha encontrado este sábado tres linces recién nacidos en una de las naves de su explotación en las que guardaba pacas de paja. Tras informar a las autoridades, se ha vigilado a los animales hasta que la madre trasladó a sus crías hasta otro lugar.
El hallazgo del ganadero se produjo el pasado sábado, cuando acudió a una de sus naves en las que guarda paja de reserva. Pese a que inicialmente “pensó que eran gatos”, tras percatarse de que eran diferentes, llamó al 112. Por su parte, los agentes medioambientales y del Seprona acudieron hasta el lugar una vez recibieron el aviso.
Ya en el lugar, instalaron cámaras de foto-trampeo con las que pudieron comprobar cómo la madre alimentó a los pequeños durante un día y medio, hasta que finalmente el lunes decidió trasladarlos a otro lugar. Dado que la madre es un ejemplar nacido en libertad y no cuenta con dispositivo de seguimiento alguno, se desconoce hacia dónde se han dirigido.
La nave donde se produjo el alumbramiento de los linces es utilizada por el ganadero de Menasalbas para almacenar pacas de paja de reserva. Por ello, no acude allí de forma habitual, convirtiendo el lugar en un refugio tranquilo e idóneo para que la hembra de lince diese a luz.
Esta no es la primera vez que ejemplares de esta especie escogen lugares habitados para parir a sus crías. Si bien, estos siempre suelen ser poco concurridos. Los linces salieron del peligro crítico de extinción en 2015 y han alcanzado una población en esa comunidad autónoma de unos 700 individuos, siendo 300 de ellos cachorros y 400 subadultos.
