El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente ha adelantado que se encuentra estudiando la posibilidad de recurrir ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) la política de bajos precios de Ouigo. A juicio de Puente, las prácticas “desleales” de la compañía francesa perjudican a Renfe y a Iryo.
Óscar Puente pretende ir un paso más allá contra la política de bajos precios por parte de Ouigo, una de las tres operadoras de los trenes de alta velocidad en España, junto con Renfe e Iryo. En este sentido, el ministro está estudiando recurrir ante la CNMC lo que considera prácticas “desleales” por parte de Ouigo, algo que está “arrastrando” a Renfe y a Iryo a obtener “malos resultados”.
“Estamos estudiando incluso acudir a la CNMC porque entendemos que están empleando prácticas que son desde nuestro punto de vista tremendamente desleales”, ha explicado Puente en una entrevista en Onda Cero. Su política contra el “dumping” de Ouigo comenzó poco después de su llegada al Ministerio, empezando “por hacerlo público”, y siguiendo por “hablar con el Gobierno francés”, al que acusa de poner “todas las dificultades del mundo” a la operación de Renfe en el país galo.
Según expone el ministro, Ouigo lleva una política de precios que le lleva a incurrir en pérdidas, que son soportadas por el Estado francés, a través de SNCF, la empresa estatal de ferrocarril y propietaria de Ouigo al 100%. Asimismo, asegura que la caída de precios no es sostenible, ya que también está provocando pérdidas en Renfe e Iryo.
“Lo que iba a ser una competencia sana se convirtió en una guerra desde el primer minuto. La francesa (Ouigo) está vendiendo desde el principio muy por debajo del coste, pérdidas de 40 millones al año, y con este comportamiento ha arrastrado a las otras dos competidoras, Iryo, que venía a competir en calidad con trenes nuevos de alto ‘standing’, y Renfe. Nos ha arrastrado a resultados malos en corredores que eran rentables”, lamentaba.
Puente, quien ha asegurado que como ministro tiene la “obligación de proteger” a Renfe frente al “dumping” de precios de Ouigo, expone que con ello además busca que la española pueda seguir prestando servicio tanto en los corredores rentables como en otros que no lo son, en los que otras compañías no se plantean acceder.
Este es un nuevo capítulo de la ‘guerra’ soterrada entre Renfe y SNCF, las empresas estatales de ferrocarril de España y Francia. El conflicto entre ambas se inició con la liberalización del tren de pasajeros y las “dificultades” que le ponen en Francia a Renfe para extender sus servicios por el país vecino. Ahora, la agresiva política de precios bajos de Ouigo, que vende billetes de alta velocidad desde 9€, no ha hecho sino acrecentar las tensiones.