Las obras de la carretera de Ledesma sufrirán otro retraso considerable y no estarán concluidas, como muy pronto, hasta septiembre de este año.
El equipo de Gobierno municipal dijo en noviembre de 2022 que la reurbanización de la zona estaría concluida en 2023. Luego revisaron los plazos y anunciaron que estarían acabadas en mayo de este año, pero ahora ha presentado suspensión de pagos la empresa adjudicataria y se está tramitando la cesión del contrato a Martobar, que retomará las obras «la próxima semana», según dijo el concejal de Urbanismo, Fernando Carabias.
«Martobar reanudará las obras en el momento en que estén debidamente formalizados los documentos de cesión. La fecha prevista para finalizar la obra es septiembre de 2024», dijo Carabias en el pleno municipal.
Luego precisó que «Martobar se hará cargo de las obras la próxima semana. La empresa está preparada para acabar la obra lo antes posible con la garantía y satisfacción a la que nos tiene acostumbrados!», apostilló, sin mención alguna a la solvencia de la que se adjudicó el contrato y la situación a acabado de este modo.
De eso se encargó el concejal socialista José María Collados, quien recordó que «la obra ha tenido problemas desde el principio por zanjas, tubos, bordillos, un trozo hecho y otro no, entre quejas de los vecinos y los comerciantes. Ahora las obras llevan paralizadas dos semanas y lo que se tarde. Algo harán ustedes mal. Las obras se paran en vacaciones, otros días no se hacía nada, un día se veían dos obreros y otro tres,… Si fuera en La Rúa ya la habrían terminado, pero como es Pizarrales,… Han mostrado incompetencia en el seguimiento de la obra», concluyó Collados.
Carabias afirmó que la cesión del contrato a Martobar «es la mejor manera que continuar la obra en el menor tiempo posible. Cualquier otra fórmula ocasionaría más retraso», dijo.