Lo que le está ocurriendo a Pedro Sánchez guarda similitudes con otras persecuciones previas que han sufrido dirigentes políticos de la izquierda española en los últimos años.
La derecha política, judicial y mediática les hicieron la vida imposible y hasta se abrieron causas judiciales para darle fuste a las acusaciones contra ellos, erosionarlos políticamente y, cuando lograron su objetivo, se supo que se archivaban todas esas causas de corrupción flagrante.
Es el caso de Pablo Iglesias (más de un año la extrema derecha escracheándolo ante su casa), Mónica Oltra, Podemos (y el disparate de la financiación venezolana e iraní) y Alberto Rodríguez, entre otros.
Algo similar a lo que se ha vivido también el país vecino con el exprimer ministro portugués (socialista) António Costa, que dimitió el pasado mes de noviembre tras verse envuelto en una investigación relacionada con tráfico de influencias, corrupción y prevaricación en proyectos energéticos. El presidente de la república, que pertenece al partido conservador, entonces en la oposición, no perdió un minuto y dos días después convocó elecciones para marzo de este año «como única salida a la crisis».
Los portugueses votaron medio de ese clima y la derecha gobierna hoy el país vecino en minoría y la extrema derecha se ha fortalecido.
La Fiscalía apreció delitos de prevaricación, corrupción y tráfico de influencias de varios detenidos (algunos citaban presuntamente al exprimer ministro socialista dimitido) y hace apenas dos semanas se critica la instrucción y se reconoce que no había indicios delictivos contra Costa y relativiza las acusaciones contra los detenidos en la operación judicial.
Las redes lo recuerdan todo a raíz del anuncio de Pedro Sánchez. Cómo se le hace la vida imposible al objetivo a batir hasta que lo doblegan. El patrón es similar en todos los casos.
4 comentarios en «Se repite el patrón que con Iglesias, Podemos y Mónica Oltra»
La extrema derecha catalana JUNTS PER CATALUNYA aliada con el vigente gobierno
Mientras una parte importante de la justicia esté en manos de quién está , siga condicionada por una ideología e intereses determinados , no vamos a tener una verdadera democracia a favor de los ciudadanos. Son muchos los intereses y las presiones que condicionan a este gobierno a la hora de sacar cualquier medida. Esto recuerda mucho la situación de la segunda República. No cayó sólo por un golpe cuartelero. Nuestra democracia está infectada por la lacra del dinero, la prensa cavernícola y la iglesia ********. Se han colado en las instituciones y la están socavando desde dentro, eso sí, siempre apelando a «su» democracia.
si esto no cambia NO se puede creer rn la justicia esta solo vale para los robagallinas y nada mas
A los jueces no les da vergüenza lo que están perpetrando? y el PP?. Propongo que el próximo ministro de Fomento sea el novia de la frutera.