Después de las elecciones catalanas de este domingo, que dejaron al PSC como claro ganador, así como el hundimiento del independentismo, los socialistas han confirmado que priorizarán el acuerdo tripartito con ERC y Comuns Sumar. Por su parte, Carles Puigdemont, que quedó en segundo lugar, también ha asegurado que aspira a lograr la presidencia, mientras que Pere Aragonès dejará la política tras el “batacazo” de ERC.
El PSC buscará lograr los apoyos suficientes para conseguir la investidura de Salvador Illa tras la clara victoria obtenida en las urnas este domingo. Para ello, los socialistas se abren a negociar con todas las formaciones que han obtenido representación en el Parlament catalán, exceptuando a Vox y Aliança Catalana. Si bien, tal y como han dejado claro este lunes, su prioridad pasa por formar un gobierno progresista con ERC y Comuns Sumar.
Así lo ha confirmado la portavoz del PSC, Núria Parlon, quien ha indicado que Illa pretende llegar a la presidencia con los apoyos de las formaciones progresistas, formando un Govern tripartito. Además, ha cerrado la puerta a facilitar la investidura de Carles Puigdemont, quien quedó en segunda posición, a 7 escaños de los socialistas.
“No daremos apoyo a la investidura de Puigdemont. La ciudadanía ha hablado claro y el independentismo en este momento no tiene una mayoría legítima como para reclamar este Govern encabezado por Carles Puigdemont. Esto le tiene que quedar muy claro a Puigdemont, aunque nos amenace con bloquear la gobernabilidad en España”, ha zanjado Parlon.
Por su parte, el líder de Junts también ha dejado clara su intención de presentarse a la investidura, en la que buscará la presidencia con una mayoría simple con los apoyos de ERC y la CUP, así como con la abstención de los socialistas. “Me veo como presidente”, “hay opciones ciertas de conseguir más votos por el sí que por el no”, ha insistido Puigdemont.
El objetivo del expresident fugado pasaría por lograr el apoyo de ERC, con los que asegura ya han establecido contactos para “rehacer puentes”. Tras ello, necesitaría los votos favorables de la CUP, algo que reconoce es “difícil”, aunque “es posible”. Si bien, esta última formación quedaría fuera del ejecutivo. Finalmente, Puigdemont apelaría al PSC para que se abstuviese, alegando que “hay más fortaleza parlamentaria en nuestro gobierno que en otro encabezado por Illa”.
En caso de no lograr su objetivo, desde Junts han afirmado que no romperán el pacto a nivel nacional con el PSOE para apoyar al Ejecutivo de Pedro Sánchez si Illa conforma un tripartito. “No amenazamos a Sánchez con que acaba la legislatura si hay un tripartito de izquierdas, pero si hay juego sucio como es apoyarse en el PP en Vox, entonces no podemos continuar”, advertían.
Aragonès deja la política
El actual president de la Generalitat y líder de ERC, Pere Aragonès, ha confirmado este lunes que no recogerá su acta como diputado, así como que abandonará la política. “Dejo la primera línea de la política”, ha anunciado el republicano después del “batacazo” de ERC, que ha perdido 13 escaños.
Respecto a los pactos para la investidura, aunque no ha dejado claro cuál será el voto de su formación, ha señalado que “ERC será elemento de desbloqueo” y “no estaremos para facilitar una investidura del PSC y no participaremos en operaciones que necesiten el acuerdo entre PSC y Junts”. “Corresponde a PSC y Junts decidir qué hacer”, añadía, dejando abierta la puerta a que su formación no bloquee la investidura de Illa con una posible abstención.