El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (Csic), a través del Instituto de Ciencias del Patrimonio (Incipit), llevará a cabo durante el mes de junio estudios arqueológicos en los pastizales de altura de Torre de Babia (Cabrillanes, León), dando así continuidad a las investigaciones desarrolladas en años anteriores en la zona, con el fin último de rastrear los orígenes de la ganadería trashumante en la comarca.
El Incipit lleva trabajando en esa línea de investigación desde 2017 y por el momento los resultados alcanzados destacan el protagonismo de la ganadería en la formación de los paisajes de montaña en la Cordillera Cantábrica. El equipo, liderado por David González Álvarez, investigador Ramón y Cajal en el Incipit, está integrado por un nutrido grupo de especialistas de distintas disciplinas, quienes explorarán la compleja biografía de estos paisajes culturales de montaña.
Concentrará sus pesquisas en el entorno de la laguna de Las Verdes, en Torre de Babia (Cabrillanes). Las labores de investigación se basan en fondos provistos por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades a través del programa Ramón y Cajal, así como por el proyecto ‘Arqueología histórica de los paisajes rurales en el noroeste ibérico (Rurarq)’ financiado por la Axencia Galega de Innovación (Gain) de la Xunta de Galicia. Los trabajos cuentan, además, con la colaboración del Ayuntamiento de Cabrillanes y la Junta Vecinal de Torre de Babia.
“Hablar de trashumancia en la montaña leonesa nos lleva rápidamente a pensar en la formación del Honrado Concejo de La Mesta en tiempos del rey Alfonso X El Sabio, con una orientación inicial centrada en la lana. Este hito histórico sobresale al reconocer el origen de este formato ganadero en época medieval, contemplándose pocos cambios en sus características durante los siglos siguientes”, explica David González Álvarez.
“Sin embargo, las investigaciones que hasta el momento hemos desarrollado en Babia reconocen modelos diversos para la gestión ganadera en diferentes etapas históricas. Inclusive, se han identificado evidencias de la existencia de prácticas trashumantes más antiguas, por ejemplo, en época visigoda o en la Prehistoria reciente. Las formas precisas de esos manejos ganaderos variarían en función de las condiciones económicas o sociopolíticas de cada momento, así como de la adaptación de los grupos humanos a factores ambientales cambiantes. Reconocer la relevancia de estas variables es nuestro objetivo más ambicioso”, añade.
La historia de Torre de Babia se encuentra íntimamente ligada a la ganadería trashumante. Son conocidos algunos indicios que señalan la antigüedad de esta actividad en la zona: a comienzos del siglo XX se recuperaron dos hoces de bronce en la majada de Las Verdes. Estas singulares piezas, que hoy forman parte de la colección permanente del Museo de León, pueden ser tomadas como indicios de las tareas de apertura de los pastizales de altura por las comunidades prehistóricas de la Edad el Bronce.
“Hemos hallado huellas de la ocupación de estos espacios que se retrotraen a comienzos de la Prehistoria reciente, hace unos 5.000 años. La excavación de pequeños sondeos y la realización de prospecciones geofísicas con magnetómetro y georradar en el entorno de Las Verdes ofrecen nuevos datos que ayudarán a profundizar en el conocimiento de esas formas más antiguas de pastoreo”, expone González.
“A raíz del trabajo que vamos a realizar estas semanas confiamos en reconocer los reflejos más antiguos de la ganadería en la comarca, lo cual podría quizá constituir un nuevo estímulo que revalorizase las posibilidades de esta actividad para el futuro de esta tierra. Completadas las labores arqueológicas previstas sobre el terreno, presentaremos los resultados en varias actividades programadas para los próximos meses de la mano de la instituciones y asociaciones locales de Babia”, concluye.
El proyecto Rurarq
Está financiado con más de 100.00 euros por la Axencia Galega de Innovación (Gain) y tiene a David González Álvarez como investigador principal. Además de personal del Incipit, participan especialistas de la Universidade do Minho (Portugal), la Universitat d’Alacant, la Universidad de Oviedo y el Instituto Max Planck de Geoantropología (Alemania).
Se inició en otoño de 2023 y concluirá a finales de 2027. Su objetivo es producir lecturas arqueológicas sobre los espacios rurales del noroeste ibérico entre los siglos XVI y XXI. Comprende una serie de campañas arqueológicas en varios casos de estudio distribuidos en Galicia, León, Asturias y el Norte de Portugal.
