Allá por los ochenta, muchas adolescentes quisieron ser la Marta que tenía un marcapasos, para poder ir a Venecia con David Summers. Pero, el líder de Hombres G se casó y tuvo mellizos. No ocultó su boda, por lo que aquellas miles y miles, quizá millones de jovencitas que suspiraban por sus besos, siguieron haciéndolo, pero de manera platónica.
Pasaron los años y David Summers volvió a estar soltero. Coincidió su nuevo estado civil con el resurgir de Hombres G, no se habían ido nunca, pero sí que se echaron a un lado y su lugar fue ocupado por otros grupos durante varias décadas.
Pero, los nostálgicos reclamaron que las canciones del grupo más pijo de la Movida madrileña tenían su aquel. Y volvieron a llenar estadios y plazas donde tocaban.
David Summers volvió a escuchar desde el publico aquello de Te quiero con tono femenino. Pero, con voz varonil también pudo oír lo otro de Sufre mamón con la chica me quedé yo.
Ahora, previa exclusiva en la revista Hola, el soltero de la generación X (nacidos entre 1965 y 1981) volverá a cambiar de estado civil. La afortunada que ha conquistado el corazón de David Summers es Christine Cambeiro, una neoyorkina fan de Hombres G, que ha sabido decirle aquello de Si no te tengo a ti.