El conocido como ‘virus de la bofetada’ o parvovirus B19 está generando una oleada de contagios que ha generado preocupación entre las autoridades sanitarias. Esta enfermedad afecta especialmente a los niños y se transmite por el contacto con secreciones.
En las últimas semanas se ha detectado un “inusual aumento” de casos del ‘virus de la bofetada’ en 14 países de la Unión Europea, tal y como ha alertado el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC). En España, el incremento de casos ha sido detectado por el Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (Ispln), aunque por el momento la mayoría son leves.
En su informe, el Ispln indica que se trata de una enfermedad transmitida por el contacto con secreciones, señalando que el eritema intenso en las mejillas es el signo más típico de la infección. Además, aseguran que el ‘virus de la bofetada’ puede causar “brotes en centros escolares y colectividades infantiles”, por lo que recomiendan que, en caso de presentar síntomas, los niños no deben ir a clase.
Por otro lado, aclaran que este virus se puede transmitir tanto al hablar, como al toser o estornudar. También insisten en que se trata de una infección muy contagiosa, aunque matizan que generalmente son casos leves y no se requiere aislamiento, aunque es fundamental una buena higiene de manos y no compartir alimentos o bebidas.
En cuanto a los síntomas, la Escuela de Salud del Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona enumera como los más comunes la fiebre, los síntomas catarrales leves, el malestar general y el dolor muscular y en articulaciones. Además, pasados unos días, aparece una erupción de color rojo intenso en la piel “que comienza en las mejillas y produce en el niño el aspecto de haber recibido una bofetada”, y que continúa extendiéndose por todo el cuerpo.