Una actuación para todos los sentidos. Un lujo escuchar hablar de las bondades del chocolate, un espectáculo para la vista el patio central de la Casa Lis con sus vidrieras y un gusto para el paladar saborear esa calle de ladrillos rojos y argamasa blanca que estaba muy buena.
El espectáculo se vivió y disfrutó este domingo y consistió en la elaboración de una pared de chocolate atemperado y coloreado simulando una pared de ladrillo caravista, en la que un artista urbano realizará un graffiti en directo con sprays de pintura de chocolate representando el logo de Fàcyl.
Al terminar, con un mazo se fue rompiendo el muro sobre una tela y los asistentes degustaron un trozo del arte efímero que acaban de ver realizar.
Imagen. Pablo de la Peña.