En tiempos de incertidumbre e insatisfacción, hacen falta personas dignas y prestigiosas que digan la verdad y sean ejemplares. Figuras honestas, que hagan competente el gobierno y no instrumento de poder; necesarias también para que transformen a la oposición de catastrofista en constructiva. Que escaseen es el principal motivo de hartazgo y decepción de los ciudadanos de a pie. Hora es que las instituciones obren en favor de lo general y quienes las gestionan, honrados.
Lo del “y tú más” está tan metido entre pecho y espalda de la política nacional que sacárselo va a costar. Lo de los mutuos reproches y tirarse con lo que pillan a mano es una constante. Malicias y enfrentamientos que causan en la ciudadanía fastidio y en las relaciones sociales crispación. La verdad, viéndolos con ansias de acaparar influencia, denigrar a todos los que no comparten sus creencias y atacar feroces a quienes se les enfrentan, dan ganas de borrarlos del mapa.
Sobran las descalificaciones, faltas de respeto e insultos de cada día, los discursos patrióticos, ensalzarse a sí mismos y tanto charlatán anteponiendo lo que inventan a lo real. Se pasan de la raya con discusiones que no llevan a ninguna parte, provocan la fractura social y la antipatía por la política. Son en su mayoría de cacarear, romper los huevos y querer los paguen los demás. Con lo bien que estarían yendo de la mano, siendo razonables y animando a la ciudadanía a participar. Celebradas las elecciones europeas, a los dirigentes de los partidos les toca cumplir sus promesas electorales y frenar la animadversión a sus opositores; a la gente corriente, no quedarnos con los brazos cruzados mientras nos quejamos de las cosas que no nos gustan.
Licenciado en Geografía e Historia, exfuncionario de Correos y escritor
Aliseda, una puta coja (2018)
Lluvia de cenizas (2021)
Puesto a recobrar el aliento (2023)
2 comentarios en «Tiempo de cambio»
verdad lo que dices Manolo pero arto dificil, se preocupan mas de buscar trapos sucios que de construir, de pensar en como resolver los problemas de sus congeneres y si en como desacreditar al contrario, esto unido a una dispersion de partidos cada uno con sus intereses, que esto tiene mala solucion.
Saludos J.A