El conjunto de la provincia de Salamanca registró durante los cinco primeros meses del año un total de 733 nacimientos, lo que supone un 4,38 por ciento más que entre enero y mayo del año pasado, según los datos difundidos este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La mayor parte de los nacimientos corresponden a madres que tienen entre 30 y 40 años, con 480 nacimientos, que se distribuyen casi a partes iguales entre los tramos de 30 a 34 años (249 criaturas) y las que tienen entre 35 y 39 años (231 bebés).
Otros 79 nacimientos corresponden a madres de 40 años y más (hay una madre con más de 50 años que dio a luz en abril).
Con todo, el aumento de los nacimientos en Salamanca está en la parte baja de la tabla de Castilla y León, donde el incremento acumulado entre enero y mayo es del 6,1 por ciento. Destaca la evolución de Segovia, donde crecen un 21 por ciento, Burgos y León con más de un 8 por ciento, Ávila un 7 por ciento u Zamora, un 6 por ciento.
Por debajo de Salamanca están Palencia y Valladolid, con crecimientos del 4 por ciento, y Soria, donde caen un 7 por ciento.
En el conjunto de España, el número de nacimientos experimentó un aumento del 0,9 por ciento durante los cinco primeros meses del año.
El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha aprovechado este dato en CyL para atribuirse el mérito. Ha destacado los datos que ha publicado el Instituto Nacional de Estadística, que revelan que los nacimientos en Castilla y León han aumentado un 6,5 % en lo que va de año, siendo la tercera comunidad donde más ha crecido, y un 21 % en el caso de la provincia de Segovia. Se trata, como ha indicado, de una buena noticia, que refleja un cambio de tendencia en la lucha contra la despoblación.
Además, ha recordado que nunca ha habido más gente trabajando un mes de junio en toda la serie histórica en la Comunidad, y, por otro lado, se ha producido un incremento en producción industrial, así como en las exportaciones, que han crecido en torno al 12 % en lo que llevamos de año.
Estos son solo algunos datos que ponen de manifiesto que «Castilla y León funciona» en palabras del presidente, quien ha señalado que este dinamismo también está impulsado por el potencial de la industria agroalimentaria en la Comunidad, que genera cerca de 44.000 empleos, actividad económica, y sirve para fijar población, especialmente en el medio rural.