Un grupo de científicos ha dado la voz de alarma ante la posibilidad de un colapso cercano de la corriente atlántica Amoc, la circulación de retorno meridional del Atlántico. Además, en caso de producirse tendría graves consecuencias, ya que llevaría a un cambio climático abrupto.
Hace unos meses, el profesor Stefan Rahmstorf advertía que existe entre un 35% y un 45% de probabilidades de que se produzca un colapso en la corriente atlántica Amoc a lo largo de la próxima década. La Amoc es la circulación de retorno meridional del océano Atlántico, un sistema de corrientes que transportan agua caliente desde los trópicos hasta la zona norte, y agua fría desde allí hasta el sur.
A raíz de esta advertencia, que, de producirse traería graves consecuencias en la regulación del clima, surgió un gran revuelo entre la comunidad científica. Si bien, los expertos no acaban de ponerse de acuerdo sobre la posibilidad de que esto se produzca ahora. Así pues, mientras que desde el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (Ipcc) consideran poco probable que el colapso tenga lugar en el siglo XXI, un nuevo estudio hace una previsión más preocupante.
Concretamente, los hermanos Ditlevsen, autores de este trabajo publicado en ‘Nature Communications’, han concluido que la Amoc podría colapsar mucho antes de que concluya el presente siglo. Según estos expertos, el colapso sucedería en torno al año 2057. “Sé que es lo más controvertido del trabajo y me gustaría equivocarme. Pero si las emisiones siguen como hasta ahora, los resultados que obtenemos son los que son”, recalca Susanne Ditlevsen.
Por ello, insisten en la necesidad de tomar medidas para evitar ese colapso. Entre otras, destacan la reducción del impacto de los gases de efecto invernadero que causan la subida de temperaturas y la entrada de agua dulce al océano por el derretimiento de hielo en el Polo Norte.
