Una reciente investigación ha asociado la pérdida de visión y el colesterol alto con un mayor riesgo de sufrir demencia. Hasta el momento ya se conocían otras causas relacionadas con las demencias.
El nuevo estudio de la Comisión 2024 de ‘The Lancet’ ha concluido que la pérdida de visión no tratada en edades avanzadas o el hecho de tener el colesterol alto están asociados al 9% de todos los pacientes con demencia. Así pues, estas dos causas se añaden a la lista una docena de factores de riesgo que ya se conocían.
Según los resultados del trabajo, alrededor del 7% de los casos son atribuibles a un nivel elevado de colesterol LDL (conocido como ‘malo’), en torno a los 40 años. Por su parte, el 2% están relacionados con la pérdida de visión no tratada en edades avanzadas.
Entre los factores de riesgo que ya se conocían previamente están los niveles más bajos de audición, la discapacidad auditiva, la presión arterial alta, el tabaquismo, la obesidad, la depresión, la inactividad física, la diabetes, el consumo excesivo de alcohol, la lesión cerebral traumática, la contaminación del aire y el aislamiento social.
Todos ellos, que si se tratan desde la infancia podrían retrasar o evitar la aparición de casi la mitad de casos de demencias, están relacionados con el 40% del total de casos de estas patologías. No obstante, de entre estos factores de riesgo, el informe asocia un mayor riesgo a la discapacidad auditiva y al colesterol alto, ambos con un 7%.
Finalmente, los expertos hacen algunas recomendaciones para reducir el riesgo de demencia, de aplicación tanto desde el ámbito político, como en la vida cotidiana. Algunas de ellas son la promoción de una buena educación y calidad de vida para los niños, tratar eficazmente la depresión, reducir la exposición a la contaminación atmosférica, proteger la cabeza en los deportes de contacto o mejorar la alimentación.