El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, se mostró este viernes confiado en dar “la mejor respuesta posible” en caso de volver a experimentar en Castilla y León las “circunstancias” acaecidas en el año 2022 que, desde su punto de vista, determinaron la aparición de incendios devastadores como el de la Sierra de la Culebra, en Zamora, o el de Monsagro, en la provincia de Salamanca.
J.M.A. / ICAL.- “Los riesgos dependen de las circunstancias. El año 22 concurrieron circunstancias que nuestros técnicos con más de 30 años de servicios nunca habían conocido. ¿Las circunstancias cuáles fueron? Pues fueron circunstancias de una sequedad y una falta de humedad absoluta, que llegaba al dos por ciento solo. Hablamos de vientos erráticos que llegaban a rachas de 70 kilómetros por hora, que dejaban numerosos puntos de ignición del fuego. Y hablamos de temperaturas muy altas”, resumió el consejero.
En declaraciones recogidas por Ical en la Delegación Territorial de Salamanca, Suárez-Quiñones recordó que se daba un “conjunto de factores” que hicieron esos incendios “en Castilla y León, en España, en Europa y también en otras partes del mundo, en Estados Unidos, en Canadá”. Citando a los técnicos, los llamados “incendios de sexta generación” que, según incidió, “quedan fuera de la capacidad de extinción”.
“Son incendios que no son abordables por su velocidad de propagación, crean sus propias corrientes de convención y su propia meteorología y hacen que los medios humanos, las personas y las máquinas no puedan abordarlos. Por tanto, esa dificultad existe y existirá siempre que se produzcan estas circunstancias”, aclaró el consejero.
Por suerte, no ha ocurrido así el año pasado, ni está ocurriendo este año. “Hemos tenido cuatro olas de calor de altísimas temperaturas, pero con vientos limitados y había humedad que reservábamos de las lluvias de mayo, de junio y de la frialdad de julio, gran parte de julio. Y esperemos y confiemos en que no se den y si se dan, lo acometeremos con los medios y con la colaboración de otras administraciones”, añadió.
En este sentido, recordó que Castilla y León mantiene convenios con todas las comunidades autónomas vecinas y cuenta con la colaboración “lógicamente “del Estado, “que además es competente de los medios aéreos”. “Y también con Portugal, donde hemos intervenido de forma muy habitual y este año además estamos interviniendo con bastante asiduidad. En definitiva, en base a esa coordinación, que funciona de manera excelente por parte del personal público y de las personas colaboradoras que trabajan en el operativo, esperemos que si se producen esas mismas circunstancias demos la mejor respuesta posible”, concluyó.