La Feria del Caballo de Ciudad Rodrigo ha experimentado algunos ajustes en su organización con el objetivo de mejorar la calidad del servicio ofrecido a los participantes y visitantes.
Entre ellas, la ocurrida este 11 de septiembre con la licitación de la caseta-bar que quedó desierta. Se ofreció este servicio a las tres empresas adjudicatarias de las casetas de la carpa, Dálmata Servicios, Servicios Hosteleros Miróbriga y José Manuel Marín Hernández con una propuesta de precio inferior a 400 euros.
Las dos primeras empresas decidieron no aceptar la oferta, lo que llevó a José Manuel Martín Hernández a tomar la caseta bajo las condiciones propuestas. Con estas medidas lo que se busca es dar un servicio a los jinetes durante la feria.
Además, por razones ajenas al Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo, el propietario de los hinchables La Ilusión solicitó el traslado de sus atracciones a un nuevo espacio debido a la necesidad de un hinchable de mayores dimensiones. Por ello, se ha decidido trasladar estas instalaciones al aparcamiento del Antiguo Centro de Salud.
Estos ajustes son parte del compromiso del Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo por ofrecer una Feria del Caballo más eficiente y satisfactoria para todos.