Vacuna Antigripal: Una defensa clave para el invierno
La llegada del invierno trae de la mano la temporada de gripe y por ello es fundamental recordar una herramienta que es esencial para proteger nuestra salud: la vacuna antigripal. La gripe es una infección respiratoria viral que afecta cada año a millones de personas en todo el mundo, cuyo curso evolutivo puede variar desde síntomas leves hasta complicaciones graves, especialmente en las llamadas “poblaciones vulnerables”. En este contexto, la vacunación se presenta como una medida preventiva eficaz que no solo protege al individuo vacunado, sino que también contribuye a la salud pública al reducir la propagación del virus.
¿Por qué es importante vacunarse todos los años?
Cada año, el virus de la gripe sufre mutaciones, lo que significa que el sistema inmunológico de nuestro cuerpo necesita una actualización para combatir las nuevas cepas. La vacuna antigripal se diseña cada año para proteger contra las variantes del virus que se espera que circulen durante la temporada. Es algo así como una actualización de una aplicación informática de nuestro móvil y esta actualización es vital, ya que permite al cuerpo desarrollar defensas específicas contra las cepas más probables, reduciendo así el riesgo de infección o, en caso de contraer la gripe, disminuyendo el riesgo de desarrollar una forma grave de la enfermedad.
Aunque la gripe puede parecer una enfermedad común e inofensiva, no debe subestimarse. En ciertos grupos, como los niños pequeños, los adultos mayores, las personas con enfermedades crónicas (como diabetes, enfermedades cardíacas o respiratorias) y las mujeres embarazadas, las complicaciones de la gripe pueden ser potencialmente peligrosas, llevando incluso a la hospitalización o la muerte.
Vacunarse: un acto de responsabilidad social
La vacunación no solo protege a la persona que se pone la vacuna, sino que también reduce la circulación del virus en su medio familiar o en su comunidad (personas con las que se relaciona), protegiendo a aquellos que, por diversas razones, no pueden vacunarse o tienen un sistema inmunológico más débil. Este fenómeno, conocido como «inmunidad de grupo», es crucial para proteger a las poblaciones más vulnerables y evitar brotes masivos.
Especialmente en tiempos de pandemia, cuando la preocupación por infecciones respiratorias es aún mayor, reducir la carga de enfermedades como la gripe ayuda a aliviar el sistema de salud. Durante la temporada de gripe, los hospitales sufren un aumento en el número de consultas, atenciones en urgencias y hospitalizaciones. Vacunarse contra la gripe contribuye a reducir esta presión sobre el sistema sanitario, permitiendo que los recursos puedan destinarse a otras emergencias.
Mitos y realidades sobre la vacuna antigripal
A pesar de su efectividad comprobada, existen ciertos mitos que hacen que algunas personas se muestren reticentes a vacunarse. Uno de los mitos más comunes es que la vacuna puede causar gripe. Esto es falso, ya que la vacuna contiene virus inactivados o fragmentos del virus, incapaces de provocar la enfermedad. En algunos casos, es posible que se experimenten síntomas leves como dolor en el brazo o fiebre baja, pero estos efectos son mínimos comparados con los riesgos de padecer una gripe severa.
Otro mito frecuente es que, si alguien nunca ha tenido gripe, no necesita la vacuna. Sin embargo, el hecho de no haber tenido gripe no garantiza inmunidad en el futuro, y como el virus cambia cada año, es fundamental actualizar nuestras defensas.
¿Quiénes deben vacunarse?
La vacuna antigripal está recomendada para todas las personas mayores de seis meses de edad, con especial énfasis en los grupos de riesgo: niños pequeños, adultos mayores, embarazadas y personas con enfermedades crónicas. Además, los trabajadores sanitarios y cuidadores de personas vulnerables deben vacunarse para evitar la transmisión del virus a sus pacientes o familiares.
Conclusión
Vacunarse contra la gripe es una acción sencilla que puede tener un impacto significativo en nuestra salud y la de quienes nos rodean. En esta temporada, toma la decisión informada de protegerte y proteger a tu familia y a tu comunidad.
En Castilla y León la cita para la vacunación puede solicitarse a través de los canales habituales: App Sacyl Conecta, el teléfono de cita previa de su centro de salud, a través de la web y presencialmente en su centro de salud.
Si aún tiene dudas acerca de si debe o no vacunarse y sobre cómo hacer para ponerse la vacuna consulte a su médico o su enfermera de su centro de salud. La prevención es la mejor herramienta para enfrentar la gripe y contribuir a un invierno más saludable para todos, así que referido a la vacuna ¡Póntela, Pónsela!
Miguel Barrueco Ferrero, médico y profesor universitario
@BarruecoMiguel
2 comentarios en «La vacuna de la gripe: póntela, pónsela»
Muchas gracias. Dudas aclaradas.
Me vacuno
Me vacunare pues