Framasa es una empresa que lleva ya más de 30 años especializada en la fabricación, comercialización, instalación y conservación de puertas automáticas para hospitales de la zona este de España, en concreto Valencia, Castellón, Alicante y Teruel.
Estas puertas son de acceso peatonal, y aunque están hechas para el sector sanitario, lo cierto es que muchas de ellas se pueden emplear en otras industrias como los hoteles o tiendas.
Fabrican e instalan diferentes tipologías de puertas automáticas
Fabrican e instalan diferentes tipologías de puertas automáticas, dependiendo de las necesidades de cada hospital o clínica. También las mantienen cuando es necesario.
Puertas correderas
Las hay de diversos tipos, como las de una hoja, las de dos, las antipánico de dos o cuatro hojas y las telescópicas que van desde las dos a las seis hojas.
Se trata de una de las puertas más versátiles, pues solucionan cualquier necesidad de paso sin tener que accionar ningún mecanismo. Pueden instalarse en una gran cantidad de edificios, como los hospitales, en donde se aprecia su bajo impacto acústico y lo duraderas que son, pese a que pasen muchas personas por ellas al día.
Puertas circulares
De dos hojas, estas dotan a los centros sanitarios de un aspecto más moderno y de una mejor estética. Además, para adaptarse a la apariencia de la clínica, la curvatura puede hacerse hacia el interior o hacia el exterior.
En los hospitales también es posible encontrar este tipo de puertas en el interior, ya que son muy funcionales. Se pueden hacer de varios materiales como el cristal o la madera.
Puertas plegables
Son las mejores cuando hay que colocar una puerta en un pasillo estrecho o en una zona en la que no abunda el espacio. Están destinadas al acceso peatonal y sus hojas se pliegan a ambos lados.
Por sus características, incorporan sistemas anti pinzamiento, anti aplastamiento y cierran de forma hermética evitando que existan cambios de temperatura entre espacios. Casi siempre se hacen de cristal, pero se construyen en madera, en aluminio o incluso con acero inoxidable.
Puertas de quirófano
Framasa también fabrica puertas de quirófano, las cuales merecen una mención especial por su importancia en los hospitales. Estas puertas deben ser herméticas y con cierre automático, pues así se garantiza la seguridad de la zona. De hecho, en estos lugares las puertas se convierten en barreras sanitarias.
Suelen poseer un sistema basculante en el automatismo. Eso hace que cuando se cierra la hoja baje y al abrir se eleve rompiendo el hermetismo. También llevan unas juntas aislantes por todo el perímetro, lo que ayuda a que sean aún más herméticas.
Los materiales con los que están construidas se han diseñado para soportar toda clase de productos de limpieza, de esos que se usan en el sector hospitalario y que pueden ser muy fuertes.
¿Qué ventajas tiene instalar puertas automáticas en los hospitales?
La instalación de puertas automáticas en hospitales, clínicas, centros de salud, etc., tiene una serie de ventajas que las convierten en imprescindibles.
Mejora de la higiene
Dentro de un centro sanitario hay que controlar las infecciones. Las puertas automáticas ayudan a hacerlo, pues eliminan el contacto físico. Así, reducen la transmisión de bacterias que suelen estar presentes en las puertas manuales.
Esto es crucial en aquellos lugares en los que el ambiente debe ser lo más estéril posible, como las zonas de cuidados intensivos, los quirófanos o las áreas de urgencias.
Una mejor accesibilidad
A un hospital acuden muchas personas con la movilidad reducida. Pueden ir con muletas, sillas de ruedas, etc., por lo que las puertas que se abren de manera automática hacen que el acceso sea más fácil para ellos.
También ayudan al personal hospitalario, ya que muchas veces llevan las manos ocupadas con equipo médico y no pueden abrir una puerta manual.
Se optimiza el flujo de personas
¿Cuántas personas atraviesan las puertas de un hospital a diario? Son miles las que lo hacen si sumamos a pacientes, visitantes, médicos, proveedores, etc.
En aquellas zonas con una mayor afluencia de público, las puertas automáticas permiten que las personas entren y salgan rápidamente, sin interrupciones de ningún tipo. No se crean cuellos de botella y se reduce el estrés de todo aquel que visita el hospital.
Ahorro energético
Las puertas automáticas cuentan con sensores de apertura. De esa forma permanecen cerradas todo el tiempo posible, cerrándose en cuanto se alejan las personas.
Con ello, lo que se consigue es mantener la temperatura interior controlada, ahorrando mucho dinero tanto en aire acondicionado como en calefacción. Esto se nota en cualquier clima, pero especialmente en los más extremos, con mucho frío en invierno y calor en verano.
Sectorización de espacios
Gracias a estas puertas se compartimentan los espacios. De hecho, se impide la entrada a determinadas zonas, dejando que solo pase el personal autorizado mediante tarjetas, códigos o incluso con el móvil.