Madrugada de viernes, fiesta y alcohol, un trinomio que puede acabar con la llegada de los agentes de la Policía Local al domicilio.
Eso ocurrió en la calle Vitigudino a las 00.22 horas de la madrugada de este viernes, cuando se desmadró una fiesta en un piso de estudiantes. Una persona denunció que desde una vivienda le arrojaron una botella de cristal por la ventana. Hasta el lugar acudió la Policía Local y se acabó la fiesta. Desalojó el inmueble.
Por alcohol también se cursó una denuncia administrativa, en este caso, fue en un control en el paseo de Canalejas a la 1.45 horas de la madrugada, cuando un conductor dio positivo en alcoholemia.
La misma denuncia administrativa y por el mismo motivo se cursó a las 4.03 horas en el paseo del Rector Esperabé. Un conductor dio positivo en alcohol.