El PSOE ha logrado que en la Comisión de Familia e Igualdad de Oportunidades de las Cortes de Castilla y León se apruebe su iniciativa, defendida por el procurador salmantino Fernando Pablos, por la que en Béjar se crearán plazas públicas de Atención Residencial con cuidados sociales y sanitarios para personas en situación de convalecencia médica antes del mes de febrero del 2026.
En la actualidad, ha indicado Pablos, Béjar cuenta con un hospital, el Virgen del Castañar, que forma parte del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca y, una de sus plantas de hospitalización, es destinada a enfermos con pluripatologías, personas que en su gran mayoría tienen una avanzada edad.
Teniendo en cuenta esto, ha añadido el procurador salmantino en defensa de su propuesta, “era de justicia y muy razonable la creación de una unidad para la atención residencial desde el punto de vista social y sanitario para pacientes convalecientes a la mayor brevedad posible”.
La propuesta socialista, explica Pablos, “incluye y posibilitará que las personas que sean atendidas por esta unidad desde el punto de vista social y sanitario, tengan una estancia mínima de dos meses ampliables por periodos no superiores al mes hasta completar un total de cuatro, un servicio que será compatible, durante 30 días al año, con la prestación económica que se otorgue por cuidados en el entorno familiar”.
“Un servicio de Atención Residencial con cuidados sociales y sanitarios para personas en situación de Convalecencia garantiza la calidad de vida y la atención integral, continuada y adaptada a las necesidades de la personas en situación de convalecencia tras recibir una asistencia médica de hospitalización promoviendo su autonomía y potenciando sus capacidades en un entorno normalizado y accesible, servicio que, por su edad, situación o circunstancias personales y familiares no tienen”, ha apelado Pablos.
De esta forma y con esta iniciativa socialista aprobada en Cortes, “los pacientes de Béjar y su comarca contarán con una atención que promueva su recuperación y el restablecimiento de las funciones alteradas por una enfermedad o patología mediante unos adecuados cuidados sanitarios y sociales”.
“Atención, cuidados y servicios, personalizados y prestados por profesionales de forma directa, que comprenden actuaciones tales como el control de la administración de medicamentos, alojamiento, alimentación saludable, fomento de la autonomía personal en función de las necesidades en la vida cotidiana y pautas de autocuidado, prevención de situaciones de dependencia o de su agravamiento entre otras muchas cuestiones relativas al ámbito de la salud que personas, especialmente con un alto índice de envejecimiento, no tiene en su ámbito tras una hospitalización”, concluyen los socialistas.