Los dos subsidios que desaparecen el 1 de noviembre

Pasan a convertirse en el subsidio por agotamiento de la prestación contributiva

A partir del próximo 1 de noviembre, el Servicio Público de Empleo Estatal (Sepe) dejará de ofrecer dos subsidios de los que venían beneficiándose varios colectivos vulnerables. Si bien, esto no significa que estos grupos de población queden desprotegidos, y es que ambas prestaciones se unificarán y pasan a convertirse en el denominado subsidio por agotamiento de la prestación contributiva.

Concretamente, las dos prestaciones que desaparecen son la ayuda familiar y el subsidio para mayores de 45 años. El fin de ambos se produce como consecuencia de la reforma de los subsidios por desempleo impulsada por el Ministerio de Trabajo. De esta manera, las dos ayudas que serán eliminadas pasan a convertirse en el nuevo subsidio por agotamiento de prestación contributiva.

Esta nueva prestación contará además con una mayor cuantía inicial, así como con una serie de mejoras en el acceso a la misma. En este sentido, también se permitirá compatibilizar la ayuda con el empleo, evitando así que los beneficiarios se vean en la obligación de escoger entre trabajar o cobrar el subsidio.

Hasta el momento, aquellos trabajadores que agotaban la prestación por desempleo, podían pasar a recibir otras ayudas, como la familiar o el subsidio para mayores de 45 años que ahora se eliminan. A partir de ahora, aunque la duración de la prestación seguirá dependiendo de la edad del solicitante y el paro consumido.

En este sentido, mientras que los menores de 45 años deberán haber agotado 360 días de paro para tener derecho a seis meses de prestación, para los mayores de 45 años el requisito baja a 120 días. Además, en el caso de los desempleados con responsabilidades familiares, independientemente de los días de paro agotados, tendrán derecho a una ayuda durante 24 meses, que podría extenderse hasta los 30.

Pasando a la cuantía, hasta ahora la cantidad que percibían los beneficiarios era fija. Sin embargo, tras la reforma, será variable y dependerá del tiempo que se lleve cobrando. Esto es, durante los primeros seis meses de ayuda se recibirá el 95% del Iprem (unos 570 euros), durante los seis meses posteriores la cuantía corresponderá al 90% del Iprem (unos 540 euros), y pasado ese tiempo, al 80% del Iprem (unos 480 euros).

Por último, cabe recordar que todos aquellos que actualmente perciban la ayuda familiar o el subsidio para mayores de 45 años, podrán seguir cobrándolo hasta que se produzca el agotamiento.

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