Los vecinos de Retortillo no salen de su asombro. Lógico, según la señalización, su pueblo comienza y termina en el mismo punto. «Tiene guasa. Ya sabíamos que nos tenían un mucho olvidados, pero esto indica que nos ignoran», ironizan desde Retortillo.
Pero no es el único pasmo que circula por el municipio, también están viendo como la carretera que une Boada con Retortillo, que tenía que estar abierta al tráfico en septiembre, según la previsión oficial, lleva casi tres meses de retraso.
Desde Retortillo quieren seguir «denunciando la dejadez de la Diputación con los pueblos pequeños como el nuestro».