El palacete neobarroco de la Avenida de Italia fue demolido este miércoles para dar paso a un edificio de viviendas complementario a otro anexo de 18 viviendas más y a un parking subterráneo con 75 plazas en el centro de Salamanca.
La casona, que se construyó en 1926 estaba en malas condiciones de conservación, lo que llevó a un constructor avispado a solicitar su declaración de ruina hace una década, lo que eliminaría la protección de que goza el inmueble por su valor urbanístico.
De hecho, la nueva promotora deberá mantener su aspecto exterior y las cubiertas en el inmueble que se levantará sobre sus ruinas que albergará seis viviendas y parte del parking subterráneo que será común al edificio contiguo que se construirá con 18 viviendas contiguo que completa el proyecto.
A finales de octubre comenzó la retirada de residuos calificados como ‘peligrosos’ así como elementos de amianto y este miércoles entró una retroexcavadora de cadena con martillo para derribar el edificio.
Desde este miércoles y mientras duren los trabajos se mantendrá cortado el tráfico entre las calles Álvaro Gil y Melchor Cano. El tráfico se desviará por las calles Álvaro Gil, Isidro Segovia y García Moreno. También permanecerán cortadas los accesos a la avenida desde las calles Luis Vives y Joaquín Costa.