El secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció este domingo la creación de una «gran empresa pública» capaz de construir y gestionar viviendas desde la Administración General del Estado. Así lo trasladó en su discurso de clausura del 41 Congreso Federal que reunió a unas 7.000 personas en el Palacio de Congresos y Exposiciones, Fibes, de Sevilla.
J.A. / ICAL.- Tras ser reelegido para liderar el PSOE durante un cuarto mandato, Pedro Sánchez tomó la palabra para repasar la acción del Gobierno y para invitar a su partido a trabajar “duro” para lograr que haya gobiernos progresistas en los territorios en los que ahora tienen ejecutivos “negacionistas”.
Pedro Sánchez llegó este domingo a las 12.20 al Plenario del Congreso Federal del PSOE, donde le esperaban miles de personas entre delegados, militantes y trabajadores del partido con pulseras luminosas que se encendían con el color rojo del partido al ritmo de la música, un recurso que se popularizó en los conciertos de la cantante americana Taylor Swift y que convirtió el cierre de filas en una jornada festiva.
Con todo preparado y las principales caras del PSOE, así como la mujer de Sánchez, Begoña Gómez, sentados ya en sus asientos, se reprodujo el mismo vídeo que un día antes se proyectó en la inauguración del Congreso y que resume los 14 años de gobiernos del Partido Popular con la guerra de Iraq, la crisis medioambiental del ‘Prestige’, subidas de impuestos y los casos de corrupción de Bárcenas y Urdangarín.
Al final del vídeo se hizo el silencio y el latido de un corazón resonó por los altavoces del pabellón Fibes de Sevilla, en el que se concentraban miles de personas para cerrar el Congreso. Al latido le siguió la llegada del ‘corazón de los socialistas’, su revalidado secretario general. Sánchez entró con música en inglés y tardó hasta diez minutos en recorrer el espacio que separaba el acceso al pabellón del escenario, saludando a militantes, delegados, y políticos socialistas. A su paso, aplausos, bailes, vítores, banderas con el logo del PSOE y pulseras luminosas que convertían el Congreso en una gran fiesta.
A Sánchez le precedieron el secretario general del PSOE andaluz y presidente de este Congreso Federal, Juan Espadas; la presidenta del PSOE, Cristina Narbona; la vicesecretaria general del partido, vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero; y su mujer, Begoña Gómez, que fue recibida entre aplausos y piropos. “¡Guapa, guapa y reina!”, le gritó una de las presentes, “¡Ánimo, Begoña!” animó otro. Los presentes en el Congreso le mostraron su cariño desde su llegada ayer pidiéndole fotos y fundiéndose con ella en abrazos y saludos.
Saludos internacionales
Tras esto, comenzaron los saludos internacionales de la mano del secretario general del Partido Socialista de Portugal, Pedro Nuno Santos, que alertó del “efecto contagio” del auge de la “extrema derecha” y señaló los retos que comparten España y Portugal, como “la emergencia climática”, “el acceso a la vivienda” y “proteger a los trabajadores”.
Por su parte, el canciller alemán, Olaf Scholz, expresó sus “condolencias” por lo sucedido en Valencia y alertó también del “auge de la extrema derecha” además de instar a Sánchez a “invertir en seguridad” en el marco europeo y a “superar juntos” los “obstáculos” que hay por delante.
El presidente del Partido Socialdemócrata Sueco, Stefan Löfven, se sumó a la alerta del “auge de la extrema derecha” y advirtió que “no importa lo sofisticada que sea una democracia para quienes la ven como un obstáculo”. La última en intervenir fue la expresidenta de Chile Michelle Bachelet, que llamó a “fortalecer lazos” para “defender valores” y “construir un futuro más equitativo”.