Rosario tenía 32 años y una hija y murió de múltiples puñaladas que le asestó su pareja en el Camí de Can Pastilla, en Palma. Autoridades, políticos y agentes sociales recordaron en la plaza de la Constitución a Rosario, la víctima mortal número 44 por violencia de género en 2024, y la 1.289 desde que comenzaron a elaborarse las estadísticas en 2003.
Rosario había denunciado a su asesino, George Teianu en noviembre, porque la amenazó de muerte, insultó y pegó. Rosario acudió a su familia y llamó a emergencias. La Policía Local de Llucmajor acudió al domicilio familiar y detuvo al agresor. Rosario y denunció a su expareja y se le interpuso una orden de alejamiento, según publica la Crónica Balear.
En el momento del asesinato, Rosario no llevaba el dispositivo ‘antimaltro’, hecho que está investigando la Policía Nacional, lo había dejado en casa. En cambio, el asesino sí que llevaba puesta la pulsera que alerta a las autoridades si se acercaba a su mujer, debido a la orden de alejamiento por malos tratos.
Rosario deja huérfanas de madre a dos niñas de 18 meses y 9 años.