Las deficiencias de las instalaciones municipales en Salamanca, entre ellas las piscinas, no cesan. Es de todos conocido que las piscinas municipales de la ciudad son instalaciones de titularidad pública, pero cedidas por contrato a una empresa privada.
Los problemas más relevantes que se pueden apreciar en estas instalaciones son de índole muy variada; desde técnicas hasta de atención al usuario. Y sin ánimo de ofender, sino de mejorar, escribo estas líneas con la intención de que haga reflexionar al gobierno municipal.
No es extraño el día en que en la instalación municipal de Garrido el agua de las duchas está fría, muy desagradable por cierto para el usuario. Además, es conocido por todos que la luz de la instalación se cortó un día por completo impidiendo a todos los usuarios acudir. Ante este hecho, la empresa concesionaria, en vez de acudir con celeridad a arreglar lo sucedido, suspende las actividades deportivas en la instalación con el consiguiente perjuicio para los usuarios que evidentemente nos quedamos sin poder entrenar. Esto recuerda a tiempos no muy lejanos cuando en plena temporada de verano, en esta misma instalación, no funcionaban las máquinas para pasar el abono a la entrada y su arreglo se demoraba más de la cuenta; de nuevo pierden los usuarios.
¿Hasta cuándo va a continuar el gobierno municipal permitiendo a la concesionaria que obre de esta manera? Teniendo la contratación pública en su mano, ¿por qué no se ocupa y preocupa de que la gestión privada sea óptima con los recursos disponibles? ¿Por qué no pide a esta concesionaria que obre con la diligencia debida? ¿Por qué no vigila a la empresa concesionaria? ¿Por qué se muestra tan celoso en hacer pública la información de la gestión de las concesionarias? Siendo instalaciones municipales ;y no privadas; los ciudadanos tenemos derecho a conocer esta información.
Los usuarios de la instalación merecemos más transparencia en los servicios municipales, ya que son públicos y por tanto de todos los salmantinos. No deberíamos consentir este secretismo del gobierno municipal con las contratas de los servicios públicos porque pagamos los usuarios de a pie cuando utilizamos las instalaciones, y como usuarios tenemos derecho a pedir mejoras en la atención y la gestión porque son instalaciones públicas.
Hay que recordar, una vez más , que lo público es de todos y somos los propios usuarios los que tenemos que exigir dignidad y mejoras en estos servicios.
Usuaria y vecina de Garrido