The Mississippi Mass Choir ofreció este viernes un vibrante concierto de góspel en el Centro de las Artes Escénicas y la Música (Caem) de Salamanca.
Fue durante el espectáculo ‘The Gospel Legend Tour’, en el que la coral estadounidense desplegó un torrente de góspel tradicional americano que primero emocionó al público y acabó agitándolo de tal forma que no paraba de bailar y cantar (o lo que fuera) bajo el poderío de las catorce voces portentosas que te mecen hasta casi entrar en trance y luego no puedes quedarte sentado en la butaca.
Y como ellos sabían que habían creado ese clima de entusiasmo, acabaron con una extensa e irresistible versión del Oh happy day al que se le encontraron unos efectos terapéuticos hasta ahora desconocidos por la clá, ya cerca del éxtasis.
Un recital lleno de poderío, incluso entonando el clásico villancico Silent night (en castellano llamado Noche de paz), que en sus voces tenía un sabor profundo y contundente.
El público les obligó a dar una ración de bises, breve, pero intensa, a la que pusieron el colofón bajando del escenario y desfilando entre el público buscando la salida, cantando, bailando y ofreciendo give me five por doquier. Un día feliz.