A voz en grito, desde un balcón, los niños vivieron con mucha ilusión el paso de la cabalgata real delante de sus ojos.
Por ello, no podían parar de gritar el nombre de los Reyes Magos, comenzaron con Melchor, siguieron con Gaspar y de Baltasar consiguieron el saludo. ¡Bendita ilusión! Esta noche todos somos niños.