La monja Simona Brambilla, ex superiora general en Italia de las Misioneras de la Consolata, ha sido nombrada el Papa Francisco prefecta del Dicasterio para la Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, órgano del que ha sido secretaria desde de octubre de 2023, encargado del control de las órdenes e institutos religiosos.
La religiosa no desarrollará sus funciones sola, ya que el pontífice ha elegido también, como proprefecto del dicasterio, al cardenal Ángel Fernández Artime, que tutelará a la monja.
El nombramiento de la italiana es significativo, pues se trata de uno de los pocos cargos de alto rango del Vaticano ocupado por una mujer. De hecho, es la segunda religiosa a la que se ha otorgado un lugar similar en la Curia Romana, puesto que en 2021 se asignó a la monja Alessandra Smerilli el Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano integral.
Simona Brambilla es enfermera, psicóloga y miembro de las Misioneras de la Consolata. Además, fue superiora general de su congregación y misionera en Mozambique.