Donald Trump se ha convertido en presidente de los Estados Unidos desde este lunes, tras la ceremonia de investidura en la que ha tomado posesión del cargo, hasta ahora ostentado por Joe Biden. Poco antes de que el cambio se materializada, Biden aprovechó sus últimas horas al frente de la Casa Blanca hacer uso de sus poderes extraordinarios y, por temor a una posible “venganza” por parte de la Administración de Trump, indultar a varios cargos que le investigaron el nuevo presidente por el asalto del Capitolio en enero de 2021.
En concreto, ha indultado preventivamente al doctor Anthony Fauci, al ex general Mark Milley y a los integrantes de la comisión de la Cámara de Representantes que investigó el atentado del 6 de enero en el Capitolio, así como a los excongresistas republicanos Liz Cheney y Adam Kinzinger quienes se han mostrado críticos con Trump en varias ocasiones.
Es habitual que los presidentes concedan indultos cuando sus mandatos están a punto de finalizar y, en el caso de Biden, se aplicarán incluso a no investigados. Sin embargo, la Casa Blanca acabara en un comunicado que estos no se deben confundir “con el reconocimiento de que estos individuos han cometido algún delito”, ni se deben malinterpretar como “una admisión de culpabilidad de cualquier infracción”. Al mismo tiempo, asegura que habrá una crisis política en caso de que el nuevo presidene de Estados Unidos intente perjudicarlos.
Por su parte, Trump anunció recientemente que cuenta con una lista de enemigos en los que se incluyen quienes le responsabilizan del asalto al Capitolio (6 de enero de 2021) o de intentar anular su derrota electoral 2020, además de los hayan tenido confrontaciones políticas con él.