No habrá subida en las pensiones ni ayudas al transporte, al menos por el momento, después de que las propuestas del Gobierno no hayan salido adelante en el Parlamento. Los votos en contra de PP y de Junts han hecho que las iniciativas del Ejecutivo no salgan adelante. Las medidas ya publicadas en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y que, por lo tanto, habían entrado ya en vigor, quedan sin efecto.
El paquete de medidas propuesto incluía otras de carácter social, como las de protección del derecho a la vivienda (paralización de los desahucios para familias vulnerables), así como un impuesto especial para las empresas energéticas. A ninguna de ellas se ha dado luz verde este miércoles. Los resultados ponen de manifiesto la ausencia de mayoría parlamentaria para el presidente Pedro Sánchez. Además, Junts ha adelantado que también votará en contra de los decretos del Gobierno en el Congreso.
En cuanto al pleno de este miércoles, una votación de 177 votos en contra y 171 a favor ha supuesto la caída del llamado decreto ómnibus, concebido para garantizar una mayor protección social ante los efectos de la guerra (protección contra los desahucios, bono social de electricidad y revalorización e las pensiones en un 2,8 por ciento). En cuanto al impuesto específico para las energéticas, los votos en con contra han sido 183, incluyendo también los de PVN y, a favor, 165.
Tanto PP como Junts han garantizado que si, en lugar de ir incluidas en un mismo decreto, las propuestas sobre la subida de las pensiones y las ayudas al transporte se presentaran como puntos individuales, votarían a favor de su entrada en vigor.
Reforma de las pensiones
El Congreso de los Diputados convalidó este miércoles por la tarde el real decreto-ley que contiene las medidas del acuerdo firmado en septiembre de 2024 con sindicatos y patronal con el que se flexibiliza la compatibilidad entre pensión y trabajo. Fue el único de los tres decretos que el Gobierno logró salvar en el pleno de hoy y contó, en este caso, con el apoyo del PP y el rechazo de Vox y de socios de investidura como Junts, Bildu Y Podemos.
El texto salió adelante por 298 votos a favor, 51 en contra y ninguna abstención y, además, se tramitará a continuación como proyecto de ley, decisión adoptada por unanimidad, de modo que los partidos podrán incorporar enmiendas.
En la defensa del texto, la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, pidió el apoyo a los grupos políticos porque “los desafíos que plantea el cambio demográfico exigen una actuación decidida en múltiples ámbitos”, como también han puesto de relieve diferentes organismos. “Vamos por la senda correcta porque, ciertamente, promover la prolongación de la vida laboral de los trabajadores de mayor edad es algo que ya venimos haciendo”, apuntó Saiz.
Eso sí, la ministra señaló que esto ha de ser voluntario y nunca se debe tener que hacer por el hecho de que las pensiones sean “insuficientes”. Además, explicó que la norma también incluye el compromiso de regular nuevos coeficientes reductores en la edad de jubilación para actividades de especial penosidad y peligrosidad. En este sentido, expresó su deseo de que el texto esté aprobado en Consejo de Ministros durante el primer trimestre de este año.
“El Real Decreto es un paso adelante hacia un sistema de pensiones más moderno, justo y adaptado a los tiempos actuales. No solo mejora las condiciones de pensionistas y trabajadores, sino que también refuerza la sostenibilidad del sistema para las futuras generaciones”, declaró Saiz. Su tono sobre este decreto fue muy diferente al empleado al inicio de su intervención al referirse al real decreto-ley que incluye, entre otras medidas, la subida de pensiones de este año y las ayudas al transporte, que no salieron adelante. Al respecto, exigió a los partidos que “no jueguen con las cosas de comer”.
