Las recetas de postres bajos en calorías y procedentes, además, de la gastronomía gallega tradicional, existen. Es decir, ‘haberlas, haylas’, y así lo demuestra la cocinera Mónica Prego que, además de tener un canal de Instagram con casi 82.000 seguidores y un completo blog (Pandebroa), reúne los secretos de las delicias de su tierra en el libro titulado ‘A carón do lume’.
En su obra llama especial atención, por ser bajo en calorías y tener como base tres ingredientes, la preparación que muchas abuelas gallegas siguen elaborando a día de hoy. Se trata de las castañas cocidas en leche que, aunque ahora se considera una ‘golosina’, fue el «único sustento» para muchas familias gallegas hace décadas. Es fácil, rico y ligero, además de ideal para combatir el frío del invierno. Su receta ha ido pasando de generación, como las que la cocinera recoge en su libro, repleto de guisos tradicionales y detalles la historia de cada uno de ellos.
Ingredientes
Para preparar este postre gallego se necesitan los siguientes ingredientes:
- 1 tazón de de castañas (en gallego, “una cunca”).
- Medio litro de leche.
- Hierba de las castañas, que es “una hierba salvaje parecida a la hierbabuena, pero no es la misma”, explica Prego.
- 1 cucharada de azúcar, que se puede sustituir por otro endulzante.
Elaboración
Después de pelar las castañas, algo que se puede hacer de forma sencilla, se deben introducir en una cazuela, a la que también añadiremos las hierbas. Todo ello cubrirá con leche y tendrá que cocer de 20 a 30 minutos, hasta que estén blandas. A continuación, se retiran del fuego y se colocan en un recipiente, como un cuenco, para aplastarlas con ayuda de un tenedor. A la preparación, una vez machacada, se le añade más leche y azúcar al gusto.
Las castañas ayudan a mantener unos buenos niveles de azúcar en sangre, son bajas en calorías y grasas y, al mismo tiempo, resultan saciantes.