El Museo de Historia de la Automoción de Salamanca (MHAS) invita una vez más a todos los apasionados de los automóviles a disfrutar y descubrir la historia de una obra industrial única, con la presentación de su pieza del mes, el fascinante Berliet MGB-2 de 1926. Este vehículo, no solo representa un hito de la industria automovilística francesa, sino también una impresionante conexión con el arte y la tradición carrocera de la familia Gómez Planche.
El Berliet MGB-2 es un testimonio de la historia de la automoción europea. La marca Berliet, fundada en Lyon en 1895 por el visionario Marius Berliet, alcanzó fama internacional por diseñar y construir tanques, vehículos industriales militares y material de artillería, como obuses y granadas. Sin embargo, el modelo expuesto este mes de febrero tiene un recorrido único. Fue importado desde Francia como chasis por Demetrio Gómez de la Rosa en 1926 y transformado en los talleres de su familia con una carrocería tipo ‘jardinera’ hecha de mimbre, demostrando el talento artesanal que los caracterizaba en Salamanca.
El Berliet MGB-2 no solo es una joya del diseño industrial de su época, sino también un reflejo de la versatilidad y creatividad que definía a la industria del automóvil en el siglo XX. A lo largo de su vida, este automóvil desempeñó diversos papeles: desde coche personal hasta calesa y vehículo de carga. Tras años de cambios, fue recuperado por Demetrio Gómez Planche, quien restauró con esmero su carrocería original, rindiendo homenaje al trabajo de su padre como carrocero y devolviendo a este modelo su esplendor con el que llegó a España.
Hoy en día, este automóvil se conserva con gran dedicación y ha sido protagonista en el prestigioso Circuito Das Beiras en Portugal durante dos ediciones consecutivas. Su participación subraya su relevancia en el panorama internacional, cruzando fronteras y captando la atención de los amantes de los vehículos históricos en Europa.
El Berliet MGB-2 estará expuesto durante todo el mes de febrero en el MHAS, invitando a sumergimos y explorar la historia de este vehículo único, así como disfrutar de una experiencia que combina arte, tecnología y tradición. Este automóvil, uno de los pocos conservados en España, es un verdadero tesoro para los amantes y coleccionistas de los vehículos históricos. Su recorrido, desde los talleres de Francia hasta su transformación en Salamanca, refleja la creatividad y la adaptación de distintas generaciones. Más allá de su valor mecánico, el Berliet rinde homenaje al patrimonio cultural e industrial de la ciudad.