Dicen que pasamos un tercio de nuestra vida durmiendo. Y es que, sin un reposo de calidad, no podríamos disfrutar plenamente de los momentos de vigilia. En este sentido, elegir el colchón adecuado se hace fundamental.
Aunque afortunadamente existen buenos modelos en el mercado, aún hay quien decide optar por colchones de baja calidad. Pero lo que a veces no nos cuentan es que escoger mal el lugar de descanso puede acarrear consecuencias muy desagradables.
Desventajas de elegir un colchón de baja calidad
A veces por un precio atractivo; otras por mantener el mismo colchón durante años… Hay decisiones que nos pueden llevar al desastre.
Del buen descanso depende el estado de salud y en este sentido un colchón de calidad marca la diferencia. ¿Pero qué pasa cuando escogemos mal? Estas son algunas de las desventajas del colchón de baja calidad:
1. Problemas en el descanso
Aunque nuestro colchón nos parezca cómodo, esto no siempre supone que sea de buena calidad. Despertarse en medio de la noche, levantarse con cansancio o moverte demasiado al dormir, son indicios de que algo no va bien.
Puede deberse a que el soporte que usamos no es el más indicado. Los colchones que no ofrecen independencia de lechos o que acumulan mucho calor entre sus fibras, tampoco ayudan a conseguir un descanso reparador.
2. Los temidos dolores de espalda
Cuando un colchón es demasiado blando, la columna no permanece alineada. La principal consecuencia de esto es que acabamos levantándonos con terribles dolores de espalda.
Si el colchón que usamos no es de buena calidad, no nos proporciona suficiente adaptabilidad para que los huesos y músculos queden libres de presiones innecesarias. La consecuencia de un mal colchón puede acarrear desde molestias al despertar hasta dolencias músculo-esqueléticas más severas.
3. Mala durabilidad, o cómo perder dinero eligiendo mal
Aunque creamos haber hecho la compra del siglo, a veces un precio atractivo esconde una bajísima durabilidad. El colchón mal escogido suele ser aquel que va perdiendo firmeza, adaptabilidad y frescura a un ritmo muy rápido.
Al final, el dinero invertido acaba siendo malgastado y nos toca volver a comprar otro al poco tiempo. No es una idea demasiado atractiva, porque los buenos modelos de colchón deben ofrecer más durabilidad y garantías de mínimo 5 años.
Cuándo elegir un colchón de muelles ensacados
Una vez observadas las desventajas, ¿cuál puede ser una solución acertada? Sin lugar a duda, se trata de los colchones de muelles ensacados.
Ventajas de los colchones de muelles ensacados
El colchón de muelles ensacados es una de las mejores opciones cuando el durmiente es de peso elevado, pero es idóneo también para cualquier persona que valora su descanso por encima de todo.
Entre las principales ventajas de este tipo de colchón destacamos:
- Son firmes, resistentes y duraderos. Representan el soporte ideal, acogiendo el cuerpo de forma natural y adaptándose al contorno del mismo.
- Ofrecen independencia de lechos. Algo esencial cuando se comparte colchón y no queremos interferir en el descanso de la otra persona.
- Requieren de menos mantenimiento que los colchones de espuma.
- Su sistema de ventilación y transpirabilidad consiguen un descanso fresco y agradable.
Observando estas ventajas, queda claro que los colchones de muelles ensacados son una alternativa saludable y de calidad con la que invertir en calidad de vida.