La muerte del actor estadounidense Gene Hackman y la pianista Betsy Arakawa, su esposa, cuyos cadáveres se encontraron esta semana en su casa de Santa Fe (Nuevo México, en EEUU), es “sospechosa” para las autoridades” del país. En este sentido, señalan indicios como el hallazo de pastillas alrededor de la mujer o el hecho de que los cuerpos, que no presentaban “ningún traumatismo externo” estuvieran en estancias diferentes.
Por todo ello, el sheriff del condado Fe, que descartó en un principio un posible crimen declara, tras conocer los datos del registro en la vivienda de la pareja, que el caso “requiere una búsqueda e investigación exhaustivas” para determinar la causa de las muertes.
El cuerpo sin vida del actor se encontraba en un vestíbulo, junto a unas gafas de sol, mientras que el de la pianista se halló en el suelo de un baño, donde también había pastillas esparcidas, según recoge la orden judicial.
Signos de descomposición y momificación
La apariencia de ambos era de que habían caído al suelo. Arakawa presentaba señales de “descomposición corporal”, así como “hinchazón en la cara” y “momificación de manos y pies”, según el testimonio de un agente.
Se descarta una fuga de gas como causa de las muertes, tras la verificación de los bomberos y la compañía que gestiona el suministro en Nuevo México. La autopsia previa no ha detectado traumatismos en ninguno de los dos fallecidos. Por el momento, “la forma y la causa de la muerte no han sido determinadas” y “los resultados oficiales de la autopsia y los informes toxicológicos están pendientes”, explican desde la oficina del sheriff. La investigación sigue “abierta”, insisten.
La pareja tenía tres perros y, uno de ellos, un pastor alemán, fue encontrado muerto dentro de un armario situado cerca de la mujer de Hackman. Los otros dos animales estaban vivos.
