Retoques en cinco plazas de Salamanca

El Ayuntamiento de Salamanca realizará mejoras en cinco plazas de la ciudad para potenciar su atractivo turístico. Así, la comisión de Medio Ambiente del miércoles se centrará en el proyecto de renaturalización de las plazas de San Cristóbal, Bretón, San Román, Las Claras y su entorno, y en la renaturalización y mejora de la accesibilidad de la calle Gütenberg en el barrio del Oeste, con un presupuesto global de 229.963 euros. Ambos forman parte del Plan de Sostenibilidad Turística de Salamanca, cofinanciado al 33 por ciento por el Consistorio, la Junta de Castilla y León y el Gobierno de España.

Las actuaciones van encaminadas a “introducir la naturaleza en el entorno urbano y generar espacios más saludables y turísticos”, dic el Consistorio. También se busca “impulsar la transición hacia la sostenibilidad medioambiental del destino y responder a la necesidad de diversificar la oferta”, a través de nuevos recursos naturales y culturales para potenciales turistas.

Las reformas incluyen la renovación de tuberías de abastecimiento de agua, la urbanización de calles para mejorar la accesibilidad y la seguridad vial, la construcción de nuevas plazas como la de Vistahermosa, la renovación de plazas como Los Bandos, así como de parques infantiles.

La modernización de infraestructuras deportivas, la construcción del nuevo polideportivo de Pizarrales y de una pista polideportiva en Los Alcaldes, además de la plantación de más árboles y arbustos en toda la ciudad y la mejora de paseos ajardinados, son otras de las actuaciones previstas.

San Cristóbal, Bretón, San Román y Las Claras

El proyecto de renaturalización de las plazas de San Cristóbal, Bretón, San Román, Las Claras y entornos cuenta con un presupuesto base de licitación de 173.278,40 euros y un plazo de ejecución de tres meses.

Se trata de “plazas con exceso de pavimentación y escasez de vegetación y mobiliario urbano”, reconoce el Ayuntamiento. Pero “desde el punto de vista turístico, cuentan con grandes potenciales culturales: por un lado, la iglesia románica de San Cristóbal y, por otro, el museo de pinturas de Santa Clara, junto a las plazas de Bretón y San Román”, señalan. La intervención servirá para reducir el efecto ‘isla de calor’ en unas plazas que, a su vez, estarán interconectadas por un corredor verde.

En cuanto a la plaza de San Cristóbal, el Consistorio plantea crear un bosque urbano en los parterres existentes mediante la mejora las plantaciones, sin modificar la estructura. Además, se naturalizarán las actuales praderas de césped, con grandes necesidades hídricas, a través de las plantaciones de especies arbustivas y tapizantes de bajo consumo hídrico.

Por otro lado, se incorporará iluminación artística para realzar la figura escultórica de San Cristóbal. A mayores, se abrirán alcorques de alineación junto a las calles Bodegones y Asadería, donde se plantarán árboles y arbustos que darán continuidad a la zona verde que se creará junto al nuevo ascensor de las ‘escaleras de la Riojana’, en la Gran Vía.

En la plaza de Bretón se procederá al ajardinamiento ornamental para embellecer el frontal donde se sitúa la escultura del músico Tomás Bretón. También se crearán dos grandes alcorques hasta los muros que limitan con las calles de acceso a Pedro Cojos y Grillo, que incluirán especies trepadoras para reverdecer por completo la pared.

Con respecto a la plaza de San Román, y dando continuidad a la zona verde que se habilitará junto a la rampa y las escaleras con otro proyecto ya adjudicado, cuyas obras comenzarán próximamente, se crearán tres alcorques individuales en alineación siguiendo el trazado paralelo a la calle Santa Clara. Además, se creará un alcorque junto a la pared del Palacio del Conde de Francos y próximo a la calle Mártires.

En lo que se refiere a la plaza de Las Claras, se dotará a la vía de dos grandes alcorques, uno en la parte superior, en la intersección con la calle Cáliz, y otro en el lateral que linda con Marquesa de Almarza. También se mejorará la estética de la fuente ornamental con una nueva cascada de dos metros de anchura.

En el entorno de estas plazas se prevé la plantación de árboles y arbustos, en alcorques tanto individuales como corridos. En la plaza de la Parra y la calle Pinto se instalarán tres alcorques individuales; en la plaza del Santo, dos; en la calle Bretón, un alcorque corrido; en la calle Mártires, cuatro individuales; y en la calle Numancia, uno.

En total, en todas estas plazas y calles se plantarán 87 árboles y 1.024 arbustos, y se instalarán 19 bancos de madera y 4 fuentes bebedero.

Barrio del Oeste

Por otra parte, la renaturalización del espacio abierto de la calle Gütenberg tiene un presupuesto base de licitación de 56.684,92 euros y un plazo de ejecución de dos meses.

Atendiendo una petición de la asociación de vecinos Zoes, se acometerá la reordenación del espacio para mejorar la accesibilidad a portales y negocios en dicha vía y se añadirán 20 bancos de madera. A su vez, se pavimentarán los espacios libres con grandes losas en color verde que mejorarán el aspecto visual, y se instalarán una fuente bebedero y una mesa de ajedrez. “De esta forma, se facilitan amplios espacios abiertos para la realización de actividades que al mismo tiempo permitan el uso inter generacional de la calle”, aseguran desde el Ayuntamiento.

Las actuales zonas ajardinadas están formadas por parterres con rosales, que se potenciarán como espacios de naturaleza urbana para aumentar la biodiversidad. En concreto, se crearán “nuevos parterres cuyas borduras estarán delimitadas por elementos naturales como rocas y troncos ornamentales, que permitirán la aparición de musgos y líquenes, así como la presencia de insectos benignos para el ser humano que, al mismo tiempo, contribuyen al control de plagas”.

Asimismo, se introducirán 172 metros cuadrados de plantas arbustivas, que crearán diferentes espacios “con gran cantidad de flores, para permitir la polinización de insectos benignos y proporcionar variado colorido en función de la estación del año”, especifican desde el Consistorio.

De igual manera, se reforzará el arbolado con 10 nuevos árboles frutales para “mejorar la biodiversidad del entorno”, y proporcionar “una variedad cromática que mejore la estética paisajista del entorno” y contribuya “a reducir el efecto ‘isla de calor’ en este entorno urbano”.