El entrenador del Real Madrid, Carlo Ancelotti, será juzgado el próximo miércoles por la Audiencia Provincial de Madrid. Está acusado de defraudar un millón de euros a Hacienda (1.062.079 de euros exactamente), y la Fiscalía pide al juez cuatro años y nueve meses de prisión por este presunto delito. Los hechos se atribuyen a los ejercicios fiscales de 2014 (386.361 euros) y 2015 (675.718 euros).
Por ello, la Fiscalía le imputa dos delitos contra la Hacienda Pública pues, aunque el técnico realizó los trámites como residente en España a efectos fiscales, con domicilio en Madrid, solo declaró sus rendimientos de trabajo vinculados al Real Madrid, y omitió los que obtuvo por la explotación de los derechos de imagen que había cedido a otras entidades. Para cobrar por estos derechos tuvo que recurrir a un “complejo” y “confuso” entramado de fideicomisos y sociedades, informa la Fiscalía.
Aismismo, el Ministerio Público sostiene que el causado “simuló” ceder sus derechos de imagen a entidades “carentes de actividad real” domiciliadas fuera de España, con el fin de ocultar estos beneficios.
Así, el 1 de julio 2013 firmó un contrato con la entidad Vapia Limited, por un periodo de diez años y un valor de 25 millones de euros euros. Al día siguiente, Vapia Limited lo nombró apoderado y le concedió “los máximos poderes de actuación para gestionar sus derechos de imagen”.
A los pocos días, el 4 de julio, se le otorgó un contrato privado con el Real Madrid, por el que cedía la mitad de sus derechos de imagen a la entidad deportiva entre el 5 de julio de 2013 y el 30 de junio de 2016. El otro 50 por ciento quedaría en poder de la entidad “no determinada”, que actuó como representante del italiano, y que resultó ser Vapia LLP, con sede en Londres, y no Vapia Limited, domiciliada en Islas Vírgenes. Estos hechos no se pusieron en conocimiento del club de fútbol hasta un año después.
A este respecto, el Ministerio Fiscal considera que, mediante esta actuación, Ancelotti “se valió de la sociedad Vapia LLP para que esta se presentara formalmente ante el Real Madrid como titular de los derechos de imagen, a pesar de que ni siquiera formalmente los tenía atribuidos, ya que el contrato de cesión referido de 1 de julio de 2013 era con Vapia Limited”.