El presidente de EEUU, Donald Trump, dio este miércoles marcha atrás de forma inesperada en su guerra comercial con el mundo y anunció que suspende durante 90 días los aranceles especiales que entraron en vigor hace dos días, excepto para China, a quien fija un arancel general del 125% para todas sus exportaciones con destino a Estados Unidos.
«La gente se estaba asustando un poco», dijo para anunciar que reculaba, aunque mantenía el arancel universal del 10% para todos, excepto para México y Canadá, a quienes libera también de ese gravamen.
Reculó después de ofender al mundo burlándose de los países que le habían pedido que no les aplicara los aranceles, diciendo que le estaban «besando el culo» y suplicándole que los liberara del impuesto.
Sin embargo, mantiene el pulso con China, a quien eleva del 104% al 125% el arancel a todas sus exportaciones hacia EEUU, después de que el gigante asiático respondiera a su guerra con aranceles casi recíprocos del 84% y anunciando que «lucharán hasta el final». «En algún momento, ojalá en un futuro cercano, China se dará cuenta de que la época en que estafaba a Estados Unidos y a otros países ya no es sostenible ni aceptable», ha escrito en su red social.
Esta tregua de Trump cogió por sorpresa a los mercados, y Wall Street reaccionó con una euforia inusitada que le permitió cerrar su mejor sesión desde 2008. El Dow Jones subió un 7,87%, el tecnológico Nasdaq un 12,16% y el S&P 500 remontó un 9,51%.
El secretario del Tesoro de EEUU, Scott Bessent, dijo que Trump no ha reculado al comprobar el rechazo mundial a su decisión y los desplomes de los mercados bursátiles, sino que es parte de su estrategia. «No respondan con represalias y serán recompensados. Estamos dispuestos a escuchar a cualquier país del mundo que quiera venir a negociar», ha dicho Bessent.
As I've said in the past, no one creates leverage for himself like @POTUS. pic.twitter.com/1DO0UPm2nS
— Secretary of Treasury Scott Bessent (@SecScottBessent) April 9, 2025