La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha detectado una nueva variante del SARS-cov-2, es decir, de la covid-19. Se denomina NB.1.8.1 y tiene especial presencia en Hong Kong y China, aunque también en territorios turísticos como Egipto, Maldivas o Tailandia.
Se ha registrado un aumento significativo de casos de hospitalización por esta nueva variante, identificada en enero, y también por la propia covid-19. Esta versión recientemente descubierta es responsable del 10% de estas infecciones.
Sus síntomas son, como en variantes anteriores, lo más habituales en pacientes con covid-19, es decir, fiebre, malestar general, escalofríos, tos, dolor de garganta, congestión, fatiga, dificultad para respirar o diarrea.
NB.1.8.1 se caracteriza por ser más fácil de transmitir que variantes anteriores, sin embargo, la buena noticia es que, hasta el momento, la enfermedad que causa no ha sido más grave.
Para garantizar la efectividad de las vacunas también frente a esta y otras posibles variantes, distintos fabricantes trabajan en versiones nuevas y de refuerzo que prevén tener listas para otoño, época con mayor número de afecciones por virus respiratorios. Sin embargo, no existen versiones específicas para la NB.1.8.1.
En cuanto a las medidas preventivas, las autoridades sanitarias siguen aconsejando las ya conocidas en situaciones similares: uso de mascarilla, lavado de manos, cubrirse la boca al toser y estornudar y permanecer en casa para evitar contagios.





















