El Banco Central Europeo bajó este jueves los tipos de interés en 25 puntos básicos, dejando la facilidad de depósito en el 2 %. Esta decisión, ya descontada por los mercados, podría llevar al euríbor a caer por debajo del 2 % por primera vez desde agosto de 2022.
La bajada llega en un contexto de inflación controlada en la eurozona: en mayo fue del 1,9 %, por debajo del objetivo del BCE. Con este panorama, se empieza a hablar de una posible pausa en la próxima reunión de julio, aunque todo dependerá de cómo evolucionen los datos y del impacto de factores externos como los aranceles de EEUU o las tensiones geopolíticas.
En la práctica, estas decisiones ya se están notando en el bolsillo de muchas familias:
- Hipotecas variables: empiezan a aliviarse. Una familia con una hipoteca media podría ahorrar más de 130 euros al mes si la revisión es anual.
- Depósitos: pierden atractivo. Hace un año ofrecían un 4 % TAE, y ahora rara vez superan el 3 %, salvo promociones puntuales.
- Crédito: también se ha abaratado. Los bancos relajaron sus condiciones tanto en hipotecas como en préstamos a empresas, según datos del Banco de España. No obstante, esta tendencia se ha moderado desde marzo, posiblemente por la incertidumbre internacional. Aun así, los tipos siguen siendo competitivos: si el perfil del cliente es sólido, es posible conseguir hipotecas fijas desde el 2,30 % o incluso variables en torno al 1,90 %, explican desde HelpMyCash.




















