El fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, ha pedido al Tribunal Supremo que archive el caso mediante el que el juez Ángel Hurtado determinó procesarle por un supuesto delito de revelación de secretos contra el empresario Alberto González Amador, pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Lo ha hecho a través de un recurso de 74 páginas dirigido a la Sala de Apelación del Tribunal Supremo desde la Abogacía del Estado, que advierte de que las conclusiones del magistrado son “ilógicas” y “voluntaristas”. Considera, además, que “los hechos investigados no son constitutivos de infracción penal” y que no “aparece suficientemente justificada su perpetración”.
De igual modo, destaca que la versión judicial “incurre en conclusiones patentemente erróneas, ilógicas o equivocadas”, pues incluye “imputaciones que son infundadas o voluntaristas”.
Respecto al correo que contenía información privada de González Amador, y cuya filtración a los medios de comunicación se atribuye al fiscal General desde el Supremo, el recurso de García Ortiz señala en el recurso que “el documento reenviado a las 08:29 horas del 14 de marzo de 2024 por Sánchez Acera a Juan Lobato -líder del PSOE madrileño en aquel momento- presenta notables diferencias respecto al correo electrónico en poder del fiscal general”.
A este respecto, sostiene que el documento ya se había hecho público con anterioridad. “Pretender apuntalar la responsabilidad penal del fiscal general a partir del eventual uso político o mediático de un documento que ya era de dominio público excede por completo el juicio racional de indicios”, apunta.
Pese a estar imputado por el Supremio, García Ortiz ha confirmado que no tiene previsto dejar su cargo.
