Vida extra para Pedro Sánchez

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reveló este miércoles en el Congreso que la implicación de su ex número tres en el ‘caso Koldo’ le llevó a plantearse un adelanto electoral. A su vez, ha anunciado un nuevo plan nacional contra la corrupción y ha chocado duramente con Feijóo, a quien ha acusado de «auspiciar» irregularidades en el PP durante 25 años.

Sánchez ha confesado que valoró seriamente la posibilidad de dimitir y convocar elecciones generales. La revelación llegó tras conocerse el informe de la UCO que vinculaba a Santos Cerdán, una figura clave en su partido, con el ‘caso Koldo’. Sin embargo, descartó esa opción porque, según sus palabras, es «un político limpio» y «tirar la toalla nunca es una opción».

Durante un pleno monográfico sobre corrupción, Sánchez expuso las tres razones fundamentales de su continuidad. «La primera es que yo no conocía las corruptelas», afirmó, asumiendo su «honda decepción» y su «error» al haber confiado en personas como el exministro José Luis Ábalos y el propio Cerdán. «La segunda es porque aspiro a recuperar la confianza de los grupos parlamentarios», añadió, prometiendo estar «a la altura» en materia de regeneración. Finalmente, defendió que su proyecto político «va mucho más allá» de su persona y «aún no está culminado».

«Me equivoqué al confiar en ellos»

Sánchez asumió su «responsabilidad» como la persona que nombró a Cerdán y Ábalos, aunque insistió en que «el culpable es quien comete los delitos». Relató que, al conocer los primeros rumores sobre Cerdán en noviembre de 2024, su primera reacción fue de incredulidad. «Lo convoqué, él me lo desmintió todo y yo le creí», explicó. El presidente aseguró que su Gobierno se enteró del contenido del informe de la UCO «cuando se hizo público, porque en mi gobierno no existe la policía patriótica». Calificó el descubrimiento como «un duro golpe» y volvió a pedir disculpas.

Para combatir futuras irregularidades, el presidente anunció un plan estatal de lucha contra la corrupción con 15 medidas diseñadas junto a la OCDE, que calificó como «el mayor impulso en esta materia en las últimas décadas». Este plan se suma a las nuevas reglas de transparencia que, según prometió, el PSOE ya está implementando a nivel interno.

Duro enfrentamiento con Feijóo

La sesión viró hacia un tenso enfrentamiento con el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo. Sánchez le acusó de llevar 25 años «consintiendo y auspiciando los casos de corrupción de su partido» y le espetó: «El único que ha mantenido una relación estrecha con un condenado es usted», en alusión a la conocida fotografía del líder popular con el narcotraficante Marcial Dorado.

Tirando de hemeroteca, Sánchez comparó las cifras de la corrupción, afirmando que el PSOE tiene actualmente «tres investigados» frente a los escándalos que, según él, salpicaron a los gobiernos del PP. Acusó al gobierno de Aznar de acumular «34 casos» y al de Rajoy de convertir la corrupción en «un problema sistémico» con «1.400 millones bajo sospecha».

Para concluir, Sánchez tildó a Feijóo de «títere de la ultraderecha» y zanjó cualquier especulación sobre un adelanto electoral, asegurando que los comicios se celebrarán «cuando tocan», en 2027.