El presidente de Cáritas Castilla y León, Guenther Eduardo Boelhoff, advirtió hoy de una “feminización de la pobreza” en la Comunidad, así como de un incremento de la atención específica que reciben mujeres en situación de vulnerabilidad como las que han sufrido violencia de género, las embarazadas que se encuentran solas o las víctimas de trata de seres.
Ical.- Boelhoff, que realizó estas declaraciones durante la presentación de la memoria anual correspondiente a 2024 de Cáritas Castilla y León, acto en el que estuvo acompañado por el arzobispo de Valladolid, Luis Argüello, y por el secretario de la ONG, Ignacio Ruiz, aseguró que el nivel de exclusión social aumenta mucho más cuando la principal mantenedora del hogar es una mujer. En total, el pasado año en la Comunidad Cáritas atendió a 937 mujeres a través de programas específicos, de las que 268 fueron mujeres en contexto de prostitución.
Además, el presidente de la ONG destacó que el 60 por ciento de las más de 62.000 personas atendidas el pasado año son extranjeras y apuntó que Cáritas se ha convertido en testigo directo del sufrimiento de las personas que llegan a nuestro país y no tienen una red familiar en la que ampararse.
Detrás de las más de 62.000 personas atendidas y 102.000 beneficiadas, hay un inversión por parte de Cáritas superior a los 47 millones de euros y el trabajo de 3.630 voluntarios y 1.127 trabajadores, “piezas fundamentales para ofrecer una respuesta profesional”, según señaló Ignacio Ruiz, que también reconoció que en los últimos años se viene registrando una disminución del número de las personas que deciden dedicar parte de su tiempo para ayudar a los demás.
Por otra parte, la memoria también refleja una ligera disminución de las personas atendidas por Cáritas que, en opinión de Boelhoff puede deberse a la mejora de la situación económica, y la constancia de que la vivienda se ha convertido en el “gran problema” para buena parte de la sociedad. En este sentido, resaltó un incremento de las ayudas destinadas al pago del alquiler o al abono de suministros como la luz o el gas.
Además, también recalcó que el empleo continúa siendo uno de los pilares fundamentales de la acción de Cáritas, dado que para muchas personas es “la puerta de entrada a una vida más autónoma, a una nueva oportunidad y la recuperación de la dignidad”. Por este motivo, la ONG atendió el pasado año a 11.317 a través de sus programas de empleo, con una inversión global superior a los ocho millones de euros. Una pieza clave en este camino son las siete empresas de inserción social promovidas por las Cáritas de la región. Desde la hostelería hasta la jardinería, pasando por el sector textil o la reutilización, estos proyectos empresariales no solo generan empleo digno, sino que se convierten en auténticos espacios de oportunidad para muchas personas en Castilla y León.
El pasado año más de 9.000 personas acudieron a las Cáritas de Castilla y León en situaciones de exclusión. Uno de los programas más relevantes en este ámbito es el de personas sin hogar, que atendió a 5.107 personas, cifra que se mantiene estable con relación a otros años.
A través del programa de salud fueron atendidas más de 4.000 personas afectadas por problemas de salud mental, adicciones o Sida, mientras que los programas de infancia y adolescencia sirvieron para atender a 3.891 personas. Con relación a estas iniciativas, Boelhoff explicó que estas acciones son la mejor forma de evitar que la pobreza pase de una generación a otra, por lo que consideró imprescindible apostar por la formación.
Financiación
El 28 por ciento de los ingresos de la ONG, 13,3 millones de euros, proceden de entidades públicas, destacando los más de 9 millones que aporta la Junta de Castilla y León, mientras que el 72 por ciento restante (33,9 millones) corresponde a donantes, aportaciones de la Iglesia, herencias y donaciones de empresas.
