En Salamanca se vendieron 1.996 viviendas el año pasado, 332 más que en 2013, pero lejos de las 5.500 de 2007, según los datos facilitados este martes por el INE.
Es la primera vez que crecen las ventas de pisos desde el comienzo de la crisis, aunque el mercado de segunda mano es el que propicia esta mejoría, porque el de la vivienda nueva sigue estancado.
En concreto, el año pasado se vendieron 1.417 pisos usados, 361 más que el ejercicio precedente, mientras que las ventas de pisos nuevos se situaron en 579 viviendas, 29 menos que en 2013 cuando ya estaban en mínimos de la serie.




















