Desde Por Salamanca queremos expresar nuestra profunda preocupación y escepticismo ante el reciente anuncio del Ayuntamiento sobre las supuestas mejoras en parques y jardines de la ciudad.
Una vez más, asistimos a una operación de imagen por parte del equipo de gobierno, encabezado por el alcalde Carlos García Carbayo, que presenta como grandes avances lo que, en realidad, son proyectos poco ambiciosos, mal diseñados y ajenos a las verdaderas necesidades de los barrios. Las promesas de ampliar los juegos infantiles en los parques de Carmelitas y Jesuitas, renovar el parque de El Baldío o mejorar los jardines de los paseos de San Vicente, Carmelitas y Torres Villarroel suenan bien en titulares, pero generan desconfianza a la luz de la experiencia reciente.
Los antecedentes no permiten el optimismo. Basta ver el resultado de intervenciones recientes como en la calle Zamora o en Torres Villarroel: supuestas zonas ajardinadas convertidas en espacios grises, con parterres estropeados, vegetación inapropiada o inexistente, y un mantenimiento claramente deficiente. En lugar de aportar valor ambiental o calidad urbana, se ha optado por soluciones cosméticas que no resisten el paso del tiempo ni responden a las necesidades ciudadanas.
Especial mención merecen los espacios infantiles. Muchos de los parques para niños en Salamanca no cumplen los requisitos mínimos de seguridad e higiene. No es una opinión: lo denuncian las familias, lo recogen informes técnicos y lo padecen diariamente los más pequeños. Los suelos actuales, lejos de proteger, se han convertido en focos de insalubridad por la acumulación de excrementos de palomas y la falta de limpieza, generando olores insoportables y un evidente riesgo sanitario.
Lo más grave es que no hablamos de hechos aislados, sino de un patrón de actuación: obras planteadas sin participación vecinal, sin planificación a largo plazo, y sin un control técnico riguroso durante su ejecución y posterior mantenimiento. Lo que debería ser una inversión al servicio del bienestar ciudadano acaba reduciéndose a una sucesión de inauguraciones apresuradas y fotografías de autopromoción.
Desde Por Salamanca, reclamamos un cambio de enfoque urgente y profundo. No se trata de hacer más, sino de hacerlo mejor: con sentido común, con participación real de los vecinos, con criterios técnicos y ecológicos, y con una voluntad clara de mantener lo que se construye. Queremos parques accesibles y funcionales, zonas verdes que aporten sombra, biodiversidad y calidad ambiental, y espacios infantiles realmente seguros, higiénicos y adecuados para el desarrollo de los niños.
Salamanca no necesita más anuncios ni más promesas incumplidas. Necesita rigor, responsabilidad y respeto hacia quienes viven la ciudad cada día. Y Por Salamanca no dejará de exigirlo.
Chenche Martín Galeano
Portavoz del Partido Por Salamanca
2 comentarios en «Preocupación y escepticismo por las mejoras en los parques»
Lo lamentable es que no haya un mínimo de mantenimiento. No incluyen el parque Colón?? Está de vergüenza. Los jardines medio secos desprendiendo olor a orín y excremento de perro. La zona de juego infantil es de risa. La gran mayoría de los parques de la ciudad son inservibles en verano. Pega en ellos tanto el sol que no se puede estar.
Eso es verdad, los parques son, en su mayoría, poco frondosos, con lo que la sombra y el ambiente no es fresco. Son poco aptos para permanecer en ellos, descansar o socializar.