Según datos oficiales en Salamanca tenemos 126 km de carril bici.
La duda está en conocer cómo se contabilizan esos kilómetros, seguramente estén incluidos los tramos compartidos con los coches (en la normativa europea no cuentan). «En cualquier caso, no se trata de tener muchos kilómetros, sino que lo que hace falta para que la bici se convierta en un medio de locomoción eficaz es una infraestructura de carril bici en red», explican desde la asociación Comité Antinuclear y Ecologista de Salamanca.
Si observamos el mapa, en Salamanca no tenemos esa red, «ni con este Gobierno Municipal se la espera. Si comparamos esos 126 km con las calles por donde circulan los coches -miles de kilómetros-, el carril bici es una ínfima parte», matizan desde la asociación.

En las ciudades donde la bici se ha impuesto en muy pocos años como medio de transporte más importante (como Londres en horario diurno), esto ha sido posible gracias a la decidida apuesta de sus ayuntamientos por la infraestructura adecuada. El único obstáculo para que la bici se convierta en el medio de locomoción más utilizado es el binomio seguridad-miedo y ese obstáculo se vence con la infraestructura pertinente.

Por eso, desde la asociación aseguran que aunque en Salamanca hay tramos muy concretos que están deteriorados -como el de la avenida José Núñez Larraz (puente de la Universidad) con unos baches horribles- pintar el carril bici de verde intenso, muy vistoso y cada muy pocos años es una irresponsabilidad cuando lo que necesitamos con urgencia es la ampliación de la infraestructura en una red coherente.
























1 comentario en «Mucha pintura y pocas nueces»
El tramo entre Parque de los Jesuitas y Policía Municipal , sólo es apto para bici de montaña.