La actriz y directora Verónica Echegui ha fallecido este domingo en Madrid a los 42 años. Según confirmaron fuentes de su entorno familiar, la intérprete madrileña murió a causa de un cáncer, que había decidido llevar con discreción, tras permanecer varios días ingresada en el Hospital 12 de Octubre.
La noticia ha conmocionado al mundo de la cultura y la política. La Unión de Actores lamentó la pérdida a través de un mensaje en sus redes sociales, una de las muchas muestras de afecto que se han sucedido en las últimas horas, incluida la del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien se ha declarado «impactado» por el fallecimiento de «una actriz con un talento y una humildad enormes que se marcha demasiado joven».
Nacida en Madrid en 1983, Echegui se convirtió en una de las caras más reconocibles del cine español tras su debut protagonista en 2006 de la mano de Bigas Luna con Yo soy la Juani. Aquel papel le valió su primera nominación al Goya como actriz revelación y catapultó una prolífica carrera que la llevó a rodar también en Italia y Estados Unidos.
Su talento fue reconocido con otras tres nominaciones a los premios Goya como actriz por sus aclamados trabajos en El patio de mi cárcel (2008), Katmandú, un espejo en el cielo (2011) y la comedia musical Explota Explota (2020).
Paradójicamente, el Goya que finalmente levantó no fue por su faceta de actriz, sino como directora. En 2022, Echegui ganó el premio al Mejor cortometraje de ficción por Tótem loba, una valiente obra basada en una experiencia personal de juventud que denuncia la normalización de la violencia machista. Al recoger el galardón, interpeló directamente a Pedro Sánchez, presente en la gala, para pedirle que viera el corto y reflexionara sobre la importancia de este problema social.
Además de su extensa filmografía, Echegui participó en series de éxito como Paquita Salas (2018), Intimidad (2022) o la reciente adaptación de Los pacientes del Doctor García (2023). A principios de este año estrenó su último trabajo, la comedia A muerte, dirigida por Dani de la Orden.
