La Diputación de Salamanca destinará un total de 4 millones de euros para dotar a los municipios de la provincia de nuevos equipamientos de protección civil y de prevención de incendios. El presidente de la institución provincial, Javier Iglesias, junto a la diputada de Fomento y Medio Ambiente, Pilar Sánchez, presentó este martes el nuevo Plan de Equipamientos, que se materializará en subvenciones para los ayuntamientos.
Ical.- Iglesias subrayó que se trata de un plan “que no surge de la noche a la mañana”, sino que se ha elaborado “escuchando a los alcaldes y evaluando las necesidades reales de nuestros pueblos”. Reconoció, no obstante, que la experiencia de los incendios forestales de este verano ha acelerado su puesta en marcha “con el objetivo de que los ayuntamientos dispongan cuanto antes de los medios necesarios para dar una respuesta eficaz”.
Según explicó, la ayuda tendrá un carácter general de hasta 15.000 euros por municipio, y podrá alcanzar los 25.000 euros en el caso de las localidades catalogadas como de Grupo I, por presentar mayor riesgo de incendios debido a la masa forestal que las rodea. En supuestos concretos, con varios núcleos de población, las cuantías podrán llegar hasta los 40.000 euros.
El plan incluye la financiación de una amplia gama de equipamientos, entre ellos hidrantes, bocas de riego, autobombas portátiles, remolques, carretillas, escaleras, batefuegos y extintores, considerados esenciales para la intervención inmediata en los cascos urbanos.
Asimismo, Iglesias destacó que la Diputación adelantará el importe de las ayudas, que requerirán una cofinanciación municipal del 20 por ciento, para facilitar la ejecución de los proyectos. Las bases estarán listas en octubre y se resolverán antes de que acabe el año, con el objetivo de que los ayuntamientos puedan tener las adquisiciones ejecutadas en junio de 2026, coincidiendo con la próxima campaña de incendios.
Por su parte, Pilar Sánchez recordó que la Diputación viene trabajando desde hace dos años en la elaboración de este programa, a raíz de la detección de carencias en hidrantes y otros equipos de protección. Añadió que las bases tendrán carácter retroactivo y cubrirán también adquisiciones realizadas por los ayuntamientos desde el pasado mes de julio, en respuesta a la gravedad de los incendios de este verano.
El presidente insistió en que el plan pretende llegar a todos los municipios solicitantes, aunque se priorizará a los incluidos en el Grupo I y a aquellos que no cuentan con parque de bomberos. “Se trata de dar a los ayuntamientos las herramientas necesarias para defender a sus vecinos frente a posibles incendios y reforzar la seguridad de los bienes y las personas en el medio rural”, concluyó.





















