Los incendios forestales causan, entre sus numerosos daños, también los de carácter piscológico, no siempre visibles, pero sí persistentes. “La depresión y el trauma tras un incendio son daños silenciosos que deben visibilizarse”, explica Rafael Escarpizo, director de la Unidad de Siniestros de Jhasa, especializada en el asesoramiento sobre los procedimientos para presentar reclamaciones tras desastres naturales. “Animamos a las personas afectadas a pedir ayuda profesional”, enfatiza.
Respecto a los daños materiales, la cobertura de incendio suele estar incluida en la mayoría de pólizas patrimoniales (hogar, comercio, industria y agro). “Según condiciones, pueden contemplarse daños por humo o explosión, gastos de salvamento, demolición y desescombro y, cuando esté contratado, pérdida de beneficios o lucro cesante”, detallan desde Jhasa. Para una tramitación adecuada se recomienda:
- Revisar la póliza, conservar restos y evidencias, como fotografías y vídeos.
- Evitar reparaciones que no sean imprescindibles para prevenir daños mayores.
- Declarar el siniestro por escrito en un plazo máximo de siete días desde que se conoce el hecho, aportando recibos, inventarios y facturas.
La cobertura final dependerá de las condiciones particulares, límites y franquicias de cada contrato.
Sin embargo, el Consorcio de Compensación de Seguros no garantiza los daños materiales causados por incendios forestales, al no considerarse un riesgo extraordinario en su marco de cobertura. Sí están contempladas, en cambio, las lesiones o fallecimientos producidos en tareas de extinción. En paralelo a la reclamación ante la aseguradora o el corredor, pueden solicitarse ayudas públicas para reconstrucción, restauración ambiental y reactivación económica.
La información y convocatorias se encuentran en el Sistema Nacional de Publicidad de Subvenciones y Ayudas Públicas (SNPSAP) y en los portales de comunidades autónomas y ayuntamientos. La tramitación coordinada de póliza y ayudas facilita la recuperación y reduce el impacto financiero, especialmente en explotaciones agrícolas y negocios con interrupción de actividad.





















