Unas mil personas se concentraron este sábado en la plaza de La Marina, en la capital zamorana, bajo el lema ‘Zamora: ¡Abandonada, quemada y vaciada!’ en respuesta a la convocatoria formulada por la Asociación ‘La Culebra no se calla’.
Juanma de Saá / ICAL. Los participantes gritaron consigas como ‘Más bomberos y menos consejeros’, además de pedir varias veces la dimisión del presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco; del consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, y del director general de Patrimonio Natural y Política Forestal, José Ángel Arranz.
Asimismo, mostraron pancartas en las que se podía leer ‘Zamora arte. La Junta, responsable’, ‘Pueblos vivos, pueblos combativos’, la versión escrita de ‘Más bomberos, menos consejeros’, ‘Dimitid. En primavera os echamos’ y ‘Arranz. Destitución ya’. También acudieron integrantes de las plataformas en Defensa de la Sanidad Pública de Zamora, Tábara y Sayago y representantes del Partido Socialista, Izquierda Unida y Ahora Decide, entre otras organizaciones.
Los presentes prorrumpieron en aplausos cuando ocho integrantes del servicio de extinción de incendios, ataviados con sus indumentarias profesionales y provistos de batefuegos, se sumaron a la concentración. Los vítores se intensificaron en dos ocasiones, cuando dos camiones de bomberos se hicieron notar en el perímetro de la plaza de La Marina.
“Nos concentramos por los incendios de este año. Se han vuelto a repetir, después de los de 2022. No se ha aprendido nada y volvemos a reivindicar lo que pedimos hacer tres años, a ver si nos hacen caso esta vez, que van más hectáreas que hace tres años. Todo son palabras y luego, nada de nada”, señaló el presidente de la Asociación ‘La Culebra no se calla’, Lucas Ferrero.
“Al final, los que vivimos todo el año en la zona, entendemos que la solución es la que proponen los pueblos, no la Administración, que no sabe ni dónde está el territorio. Queremos que se queden todo el año los bomberos forestales y que, en otoño e invierno se dediquen al desbroce y a hacer cortafuegos. Que se cree esa categoría con todas las competencias para que no solo se dediquen a extinguir en la época estival”, reclamó.
“También pedimos que haya menos burocracia para poder talar árboles, podar y desbrozar y a la Confederación Hidrográfica del Duero, que nos deje limpiar los cauces de los ríos de maleza y de esos árboles que no deberían estar ahí”, añadió.
Lucas Ferrero denunció la “descoordinación” en los operativos durante los graves incendios del pasado mes de agosto en la provincia. “Ha habido, incluso, más medios y estaban más desbordados. Las Elecciones están a la vuelta de la esquina y parece que hay ayudas para callar a la gente y tenerla conforme”, señaló.
El portavoz de la Coordinadora Rural Zamora, José María Mezquita, consideró que “la base del problema de los incendios está en la despoblación. Si no la atajamos, los incendios van a continuar” y apostilló: “Hay menos gente en los pueblos que es la que hace labores medioambientales, al final, sobre todo los que tienen ganadería extensiva y agricultura. Hemos pagado muy caro la situación en la provincia de León, con los voluntarios que han fallecido”.
José María Mezquita fue el encargado de leer el manifiesto, que fue interrumpido varias veces con gritos de los asistentes, en los que reclamaban las dimisiones del presidente de la Junta; del consejero de Medio Ambiente, y del director general, entre otros responsables institucionales.
Al terminar la lectura del manifiesto, los trabajadores del servicio de extinción de incendios, golpearon repetidas veces el suelo con sus batefuegos, como si extinguieran el fuego representado por el humo de color púrpura de una bengala.
